ESTADOS UNIDOS.- La Met Gala de este 2022 no solo vio pasar por su alfombra roja algunos de los diseños más destacados de las últimas colecciones de las grandes casas de moda, sino también un par de piezas históricas. Kim Kardashian apareció con un icónico vestido de Marilyn Monroe.

La empresaria recibió este vestido del archivo de Jean Louis como un préstamo del museo Ripley, en Florida. Monroe usó la prenda hace 60 años en una recaudación de fondos en el Madison Square Garden donde le cantó las mañanitas al entonces presidente de Estados Unidos John F. Kennedy.

Kim recibió muchas críticas por este look, pues, además de que admitió haberse sometido a una drástica dieta, se consideró imprudente y peligroso exponer la pieza, la cual pudo terminar dañada de forma irreparable.

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Por ello, el Consejo Internacional de Museos prohibió que se prestaran piezas históricas a celebridades. Esta medida se toma a pesar de que la estrella de reality se aseguró de tener cuidado con la prenda, pues solo la usó unos minutos para la alfombra roja y el resto del evento usó una réplica exacta.

Sarah Scarturro, la exjefa del departamento de Conservación de Moda del Met, estalló en contra de la famosa y del museo Ripley por el préstamo del vestido. "Cuando yo era la jefa del laboratorio de conservación del Instituto del Traje, tuve que rechazar solicitudes para que celebridades utilizaran modelos irremplazables de la colección", señaló.

Por este motivo, el Consejo Internacional de Museos exige que las prendas sean conservadas en condiciones de máxima seguridad, así como cualquier pieza de arte.

"Las prendas históricas no deben ser utilizadas por nadie, ni por figuras públicas ni privadas. Es mejor prevenir que tener que curar. El trato incorrecto destruirá un objeto para siempre", declaró el Consejo.

Usó el vestido de forma incorrecta

También señalaron que la forma en la que Kim usó el vestido fue incorrecta pues Monroe no llevaba ropa interior para dar la impresión de estar desnuda, algo que la empresaria ignoró y pudo haber afectado la confección de la prenda.

Finalmente señalaron que el diseño fue echo a la medida para encajar en el cuerpo de la actriz y no en el de Kim. La propia estrella de reality admitió haberse sometido a una drástica dieta para perder siete kilos en menos de tres semanas.

Cabe señalar que la pieza fue hecha con seda soplada, un material que ya no se fabrica, por lo que cualquier daño habría sido irreparable.