Se llama división de poderes
Cuesta mucho trabajo, pero lo que ha sucedido esta semana cuando la Suprema Corte invalidó el llamado Plan B electoral del presidente López Obrador se llama simple y llanamente división de poderes.
Cuesta mucho trabajo, pero lo que ha sucedido esta semana cuando la Suprema Corte invalidó el llamado Plan B electoral del presidente López Obrador se llama simple y llanamente división de poderes.
No le busquen.
Es eso lo que pasó, que el Poder Judicial determinó en base a la misma ley y no a partir de juicios de valor o ideología alguna, que en el Congreso de la Unión los legisladores se pasaron por el arco del triunfo el procedimiento legislativo.
No hay forma de que lo entiendan, y mucho menos lo acepten, quienes desde una posición ideológica -a veces hasta fanática- y en la absoluta ignorancia siguen, creen y apoyan de forma irracional cualquier cosa que sale de Palacio Nacional.
Fue la división de poderes la que ha permitido la alternancia en México y la debe seguir permitiendo.
No tiene ningún sentido, al menos desde un pensamiento lógico y sensato, arremeter como el mismo Presidente lo hace contra los ministros de la SCJN, puesto que simplemente han ejercido las funciones que la misma ley les otorga.
Para esto está la Corte, para corregir, para enmendar planas, para ejercer de contrapeso al Ejecutivo y al Legislativo.
Incluso el mismo Legislativo podría ejercer el mismo papel si no fuera porque como en los mejores tiempos del priismo setentero funcionan como empleados, subalternos del Presidente, cosa contra la cual ellos mismos lucharon antes de llegar al poder.
La sensatez cupo en personajes como la senadora de Morena Olga Sánchez Cordero, quien le debe su prestigio a su carrera dentro del Poder Judicial y no a la 4T. A ver cómo le va.
NAPO SIGUE SIENDO UNA AMENAZA
Los cambios realizados por el presidente López Obrador al llevar a Luisa María Alcalde a la Secretaría de Gobernación, han provocado algunos berrinches en Napoleón Gómez Urrutia. No se lleva bien con la nueva titular de Segob.
No hay que olvidar que el conflicto viene de tiempo atrás porque el senador tiene pleito casado con el padre de la funcionaria, Arturo Alcalde.
Por si fuera poco, hay señales de que Gómez Urrutia ha subido su nivel de enfrentamiento con el gobernador Alfonso Durazo.
Hace una semana circuló en redes un video donde un incondicional del senador amenazó al mandatario y le cuelga groseramente el teléfono. Se sabe que se trata de una fracción de la sección 65 del sindicato minero que disputa el contrato de la operación que Grupo Peñoles tiene en la zona de Caborca.
Gómez Urrutia no tiene llenadera y con tal de satisfacer sus ansias de poder, es capaz de paralizar regiones del Estado de Sonora, como ya lo ha hecho.
Ojalá el Gobernador no permita que Napito y sus compinches doblen sus apuestas e intenten poner en jaque la gobernabilidad y la estabilidad laboral del Estado.
Definitivamente a ese señor le tienen que poner límites, con las herramientas que estén al alcance del Gobierno.
Tristemente, las armas con las que este señor amedrenta se las ha dado la misma 4T… eso es absurdo.
Sergio Valle, periodista.