¿Sirven las mascarillas faciales LED y valen la pena? Expertos opinan
Un informe reciente cuestiona la efectividad de estas mascarillas, señalando que sus beneficios se limitan a la capa superficial de la piel.
CIUDAD DE MÉXICO.- En los últimos años, la terapia con luz LED se ha convertido en una de las opciones preferidas por expertos en belleza y celebridades para combatir los signos del envejecimiento. Este tratamiento, que solía estar disponible únicamente en spas y clínicas especializadas, ahora se ha democratizado y puede adquirirse para uso doméstico en forma de máscaras o varitas brillantes. Los dispositivos de luz LED prometen una variedad de beneficios para la piel, como suavizar líneas finas, reducir enrojecimientos e inflamaciones, combatir el acné, mejorar la elasticidad y equilibrar la pigmentación.
Sin embargo, estas innovadoras herramientas tienen un costo que varía considerablemente, desde unos $100 hasta varios miles de dólares. A pesar de las afirmaciones de rejuvenecimiento y mejora de la piel, algunas voces críticas dentro de la industria cosmética han comenzado a cuestionar la verdadera eficacia de estos productos. Un reciente informe publicado en el Times UK ha puesto en duda los resultados prometidos por estas tecnologías de alto costo.
Eficacia cuestionada por estudios recientes
La marca Lyma, que promueve una terapia de luz en casa “100 veces más efectiva que las máscaras LED”, encargó una auditoría a investigadores del Imperial College London para analizar las afirmaciones de sus competidores. Los resultados de esta auditoría señalaron que la efectividad de estos productos es “altamente cuestionable” y que sus efectos se limitan principalmente a la capa externa de la piel, sin llegar a penetrar en las capas más profundas de la dermis, donde se producirían cambios más significativos.
No obstante, las autoridades de publicidad en el Reino Unido declararon que las afirmaciones de Lyma sobre su tecnología de “láser frío” son engañosas y carecen de respaldo científico. Mientras tanto, estudios publicados en la Journal of the American Academy of Dermatology y la Journal of Clinical and Aesthetic Dermatology han demostrado beneficios medibles en el uso de la terapia LED tradicional, lo que genera un debate sobre cuál de estas tecnologías ofrece resultados reales.
Opiniones de expertos sobre la terapia LED
El Dr. Henry Legere, Director Médico de Restore Hyper Wellness, un spa médico en Estados Unidos especializado en terapia de luz roja, infrarroja y crioterapia, explicó que las máscaras LED tienden a actuar principalmente sobre la capa más superficial de la piel, ofreciendo beneficios en la piel de carácter superficial. A pesar de sus limitaciones, Legere señaló que “para lograr cambios más profundos, es necesario que la luz penetre en la dermis, lo cual las máscaras LED no suelen alcanzar”.
Por su parte, la dermatóloga cosmética certificada de Nueva York, la Dra. Michele Green, comentó que la efectividad de la luz LED depende del color de la luz emitida, ya que cada color tiene una longitud de onda diferente y, por tanto, una profundidad de penetración distinta en la piel. Mientras que la luz roja, con una longitud de onda más larga, se cree que estimula la producción de colágeno, la luz azul se dirige a las bacterias causantes del acné.
En conclusión, aunque las máscaras LED pueden ofrecer beneficios visibles en la piel, es fundamental comprender qué tipo de luz y qué longitudes de onda se están utilizando para evaluar su verdadera efectividad.