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Fallecimiento del Presidente Raisi deja a Irán de luto y en incertidumbre política

Raisi, quien había sido un fiel servidor de la República Islámica desde la Revolución de 1979, era un protegido destacado de Khamenei.

IRÁN.-El presidente iraní Ebrahim Raisi falleció el 19 de mayo de 2024, en un accidente de helicóptero en una región montañosa cerca de la frontera. Este suceso supone un golpe significativo para el liderazgo conservador de Irán, debido a la lealtad y dedicación de Raisi al régimen.

Tragedia y luto nacional

Tras una búsqueda dificultada por el mal tiempo y el terreno escarpado, se encontraron los restos del helicóptero y los cuerpos de los fallecidos. El Líder Supremo, Ayatolá Ali Khamenei, declaró un periodo de duelo nacional de cinco días en honor a Raisi.

Perfil de Ebrahim Raisi

Raisi, quien había sido un fiel servidor de la República Islámica desde la Revolución de 1979, era un protegido destacado de Khamenei. Antes de asumir la presidencia en 2021, ocupó varios cargos judiciales y fue conocido por su participación en el comité que, en 1988, sentenció a muerte a miles de prisioneros políticos, lo que le valió el apodo de “El Carnicero de Teherán”.

Desde 2006, Raisi también fue miembro de la Asamblea de Expertos, el organismo encargado de supervisar y nombrar al líder supremo. A pesar de su falta de carisma, muchos lo veían como el sucesor potencial de Khamenei.

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Controversias y protestas internas

La presidencia de Raisi estuvo marcada por una crisis de legitimidad y agitación social. Su elección en 2021 fue polémica debido a la descalificación de numerosos candidatos por el Consejo de Guardianes y una baja participación electoral. Para contentar a su base conservadora, reforzó la policía moral y las restricciones religiosas, provocando las masivas protestas de “Mujer, Vida, Libertad” tras la muerte de Mahsa Amini en 2022.

Estas protestas, las más grandes en la historia de la República Islámica, fueron reprimidas con dureza, resultando en más de 500 muertos y cientos de heridos y detenidos. La economía iraní también continuó en declive debido a la mala gestión gubernamental, la corrupción y las sanciones estadounidenses intensificadas por la represión interna y las provocaciones externas de Teherán.

Política exterior y confrontación

En el ámbito internacional, Irán bajo Raisi se distanció aún más de Occidente. Aumentó el enriquecimiento de uranio y bloqueó a los inspectores internacionales, acercándose a ser un estado umbral nuclear. Raisi también fortaleció la política de “Mirar hacia el Este”, buscando una mayor cooperación con China, que proporcionó un apoyo económico crucial e intermedió en un acuerdo diplomático con Arabia Saudita en 2023.

Además, Irán continuó su apoyo a conflictos antiestadounidenses y antioccidentales, suministrando drones de combate a Rusia para la guerra en Ucrania y armando a diversos grupos regionales.

Futuro político de Irán

Con la muerte de Raisi, el primer vicepresidente Mohammad Mokhber asumirá como presidente interino. Mokhber, similar a Raisi, ha sido una figura clave en las negociaciones de armas con Moscú. Irán deberá celebrar elecciones presidenciales en un plazo de 50 días. Queda por ver a quién designará el líder supremo como futuro presidente y posible sucesor.

Es casi seguro que los conservadores en Teherán seguirán reforzando su posición ante las presiones internas y externas. Internamente, esto podría traducirse en una mayor represión estatal y manipulación electoral. En el ámbito regional e internacional, es probable que se forjen lazos más estrechos con nuevos aliados y se persiga una confrontación calculada contra adversarios tradicionales.

Artículo original publicado en The Conversation

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