Las chácharas mentales
Todo mundo llevamos dentro una voz interior, un discurso interno.
Todo mundo llevamos dentro una voz interior, un discurso interno. En el caso de las mujeres es constante y muchas veces en alta voz, en el caso de los hombres es más factible silenciarlas, veremos cómo.
Algunas veces es en sentido neutro, pero muchas veces es en sentido negativo: “Nadie te hace caso, te hubieras quedado mejor en casa, nadie lo ha logrado antes, no nací para esto, así es mi carácter….etcétera”. Es lo que acorde con Marian Rojas, reconocida siquiatra española, le nombra chacharas mentales.
QUE OCURRE
Es muy probable que la persona haya sufrido un comentario negativo por parte de una persona influyente en ella, como puede ser un progenitor, un hermano mayor, un maestro, etcétera, y le haya expresado por ejemplo que no tiene cierta capacidad o grado de inteligencia suficiente, haya comprado ese argumento y se haya fincado en su mente.
Un ejemplo que puede aplicar en el caso de mujeres, en su casa de niña oyó que las mujeres delgadas consiguen lo que quieren, se la pasan de dieta en dieta, y a pesar de que ya están esbeltas se siguen viendo con exceso de peso, todo por un comentario vertido por su madre o por la abuela y que se les quedó grabado.
En el caso de los hombres puede suceder algo similar, sin embargo, se tiene una ventaja, que es el cuarto blanco de la mente, la nada. El hombre tiene la capacidad de meterse en ese cuarto, y cuando la mujer le pregunta qué haces o en qué piensas, y contesta que nada, eso es real.
Marian comenta que tiene un paciente que le manifestaba que no le interesaba que su esposa se metiera a decorar su cuarto blanco, que así como estaba permanecía muy cómodo en él.
QUE PODEMOS HACER
Para enfrentar las chácharas mentales, esos pensamientos negativos, lo primero es reconocerlos, y reflexionar porque tengo este pensamiento negativo. En resumen analizarlo y reconocer que no tiene que ser cierto eso.
Otra recomendación es que cuando nos demos cuenta de que el pensamiento es negativo inmediatamente rechazarlo, poner un guardia en la mente. Y un modo estupendo de lograrlo es recordando un éxito, un logro, un suceso positivo que tuvimos. Ten presente esto, estimado lector, cuando pensamos algo negativo el organismo no sabe que es solo un recuerdo o pensamiento y empieza a sufrir los cambios químicos y orgánicos del mismo modo de cuando fue real dicho evento… qué necesidad de volverlo a sufrir.
Y por último, debemos procurar que nuestras chácharas mentales sean para apoyarte no para hundirte. Y tener presente que mientras están en nuestra mente y son negativas no pagan renta, son malas inquilinas también, van para afuera de inmediato. ¿Te late estimado lector? ¡Feliz domingo!
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