Janus en México
Enero 2023, se podría caracterizar por los grandes dilemas éticos que se ventilaron en la opinión pública.
En la mitología romana se veneraba a Janus, el Dios de las puertas, los comienzos y los finales, se representaba con una imagen de dos caras mirando a ambos lados de su perfil. Enero 2023, se podría caracterizar por los grandes dilemas éticos que se ventilaron en la opinión pública. Una selección de ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia que representa lo mejor que este país puede aportar, el triunfo de la meritocracia donde después de una larga carrera en el Poder Judicial la ministra Piña asume la titularidad, en el lado anverso de la imagen encontramos a la ministra Esquivel cuya permanencia en el cargo es indefendible. En Banco de México sale el doctor Gerardo Esquivel un economista brillante que había sido designado por esta administración para ser substituido por Omar Mejía con cuestionables credenciales fuera de la lealtad partidista.
A nivel local tenemos en un tema tan trascendental como lo es el agua, ecología y desarrollo económico tenemos al doctor Durazo Montaño, contradiciendo al doctor Durazo Montaño de los dichos de sobre desalación de agua para exportar a Arizona en tan sólo unas semanas. El 31 de enero pasado negando el que existiera una conversación para enviar agua desalada a Arizona, contrastado con sus dichos de 22 de diciembre de 2022. Agradezco por este medio la respuesta puntual que dio a mi columna previa, duplicó mi número de lectores, ya son dos. Ante el impacto que tendría una megadesaladora en el Mar de Cortés habría que privilegiar el principio de máxima publicidad con apertura al debate de altura. No obstante que el tema de agua y medio ambiente, al igual que el de energía son materias reservadas para la Federación me gustaría soñar que se antepondrá el interés de Sonora ante cualquier intento de la Federación que podría resultar adverso.
En economía enero nos arroja datos alentadores sobre 2022 de ingresos del sector público con 6.8% más de lo presupuestado, 6,595,097.6 millones de pesos. Inflación en el año fue de 7.86%, un crecimiento económico a una tasa real anual de 3.5 % en el cuarto trimestre, remesas familiares por 58,497.4 millones de dólares 13.4% más que 2022, entre otros datos recientemente divulgados. La otra cara de esta misma historia para 2023 se presupuestaron ingresos por 7,123,474 mdp excluyendo deuda asumiendo un crecimiento económico del 3.0% que de acuerdo a las estimaciones del Fondo Monetario Internacional para México será de 1.7% (1.2% previamente). En la primera quincena de enero la inflación general anual fue de 7.92 % con un dato preocupante, la subyacente de 8.45% vs. un 6.11% del año anterior. Los Requerimientos Financieros del Sector Público (RFSP) o balance reportaron en 2022 un déficit de un billón 260, 915.9 mdp, se anticipan en un billón 291,149.2 mdp para 2023. El índice de confianza empresarial en manufacturas incrementó ligeramente para ubicarse en 49.79 puntos, abajo del umbral de 50 que separa entre optimismo y pesimismo.
Las remesas familiares que son sostén de muchas familias, del peso y de las reservas internacionales representan lo mejor de México, la generosidad de quienes viven fuera. Estas evidencian la ausencia de oportunidades en México de empleos bien pagados para quienes migraron por causas económicas, sin ignorar que cada día hay se le suman quienes migran por motivos de seguridad.
2023 es un año con grandes oportunidades. La oportunidad de crecimiento gracias a la oportunidad que representa el nearshoring vía inversión extranjera, ampliaciones de capacidad instalada así como ampliar la gama de proveedores nacionales va a requerir de una política pública que de condiciones de seguridad, educación, infraestructura pública, salud, entre muchos otros factores. Poco ayuda la errática narrativa del Gobierno federal en materia de inversión privada en energía, litio, transporte aéreo, localización de inversiones, entre otras áreas. Tampoco ayuda la sequía de inversión en infraestructura productiva en todo el territorio nacional para privilegiar proyectos insignia, algunos de ellos con previsibles pérdidas operativas en los próximos años.
La visión de un Gobierno empresario y privatizador como el actual donde se han privatizado puertos, aeropuertos, vías de comunicación, entre otras actividades representa un riesgo. Quienes conocen la historia de estas aventuras empresariales del sector público ya pueden anticipar los resultados de gestión. El eufemismo de utilidad social se utilizaba para no declarar en castellano simple las gigantescas pérdidas del sector paraestatal. No se debe regresar al esquema anterior de privatizar utilidades y socializar pérdidas.
Janus con sus dos caras representa a la perfección las pautas que diariamente se regurgitan desde el más alto púlpito público del País. El hombre que declara no odiar, odia. Que declara no tener ánimos de venganza, persigue. Que declara ser un demócrata, es autoritario. Que declara respetar la Constitución, la viola. Que antepone a los pobres, ha pauperizado millones. Que busca unidad, divide. Que se declara respetuoso de opiniones, reacciona con furia ante el disenso. Que declara una visión de futuro, añora el pasado.
Sólo vía la participación activa, desenmascarando a quienes como Janus se nos presentan con dos caras podremos avanzar. El dilema que tendremos al momento de definir en 2024, es realmente sencillo: Futuro o pasado, desarrollo o estancamiento, ciudadanos empoderados o encadenados, unidos o divididos, democracia o autoritarismo, federalismo o centralismo, presidencia imperial o división de poderes. La decisión estará en nuestras manos, habrá que estar preparados para cuando se nos requiera.