El mero trámite
La elección es, por supuesto, mucho más que un trámite: Es el momento real de decisión.
Falta el trámite del 2 de junio”, Claudia Sheinbaum.
Esta semana llegarán a su fin las campañas. El próximo domingo 2 de junio se llevarán a cabo las elecciones. Incluso el presidente López Obrador ha anunciado que no tendrá mañaneras el jueves 30 y el viernes 31 de mayo. Es una manera de reconocer que estas conferencias sí han sido un instrumento de campaña, pero ni siquiera él quiere poner en peligro la elección haciendo campaña en el período de reflexión. Su pupila, Claudia Sheinbaum, se ha mostrado optimista. Cuando Enrique Quintana, director general editorial de El Financiero, le preguntó, ante los consejeros del BBVA, el 6 de mayo si “Ya se coció el arroz”, ella respondió: “Bueno, falta el trámite del 2 de junio”. Después dijo que esto había sido un “chascarrillo”.
La elección es, por supuesto, mucho más que un trámite: Es el momento real de decisión. Las encuestas favorecen abrumadoramente a la candidata del partido en el poder, pero la decisión corresponde a los electores.
Los programas sociales son el factor fundamental que está inclinando la balanza. Entre los beneficiarios, Sheinbaum lidera con 64% contra 21% de Xóchitl Gálvez; entre quienes no reciben estos programas, la opositora está adelante 47 contra 36 (El Financiero). Es cierto que ha habido apoyos sociales desde hace décadas, pero López Obrador ha logrado que estos se le agradezcan a él y a su partido: 47% de los beneficiarios le atribuyen estos apoyos personalmente al Presidente y 14 a Morena (MCCI/Reforma).
Otros factores no están pesando tanto. El sector salud, por ejemplo, se ha desmoronado en este sexenio. No hay medicinas, las citas médicas se retrasan cada vez más, los equipos pasan meses descompuestos. Las clínicas y farmacias privadas se están beneficiando, pero no pueden cubrir toda la demanda que ha dejado de cumplir el sector público. “El Gobierno actual ha llevado a cabo de facto una privatización importante del sistema de salud, pero guiada por la improvisación, las ocurrencias, los prejuicios y con incompetencia -ha escrito el economista Carlos Hurtado en El Economista-. El resultado ha sido una privatización perjudicial e injusta socialmente”. Sin embargo, son muchos menos los que enfrentan las consecuencias de esta pésima privatización de la salud que quienes reciben directamente dinero del Gobierno.
No hay claridad sobre cómo se financiarán los subsidios sociales en el futuro. El Gobierno federal gastará 5.8% del PIB, ó 27.3% de sus ingresos, nada más en pensiones en 2024 (CIEP). Con el aumento de la población de mayor edad, y los incrementos que las candidatas están prometiendo, este gasto podría crecer a 7.8% del PIB en 2030; un 36% del gasto público tendría entonces que usarse sólo para pensiones. No pasarán muchos años para que el gasto social quiebre al Estado mexicano, pero nadie se preocupa por el futuro. Los beneficiarios sólo quieren su dinero, las candidatas están urgidas de comprar votos hoy.
Cuando López Obrador era presidente del PRD, en 1997-1999, se quejaba de que el PRI utilizaba el presupuesto público para comprar votos. “Utilizan recursos para dar ayudas personalizadas y obtener los votos -dijo-. Si el PRI no utiliza el presupuesto público, no ganaría”. Aprendió bien la lección. Ha utilizado el presupuesto para comprar votos y ha personalizado esas ayudas más que nadie. Esos programas sociales serán la clave para el mero trámite del 2 de junio. Por eso ha sido tan importante para Sheinbaum afirmar que mantendrá los programas sociales y que la oposición no garantiza que se conserven. Por eso Xóchitl ha dicho que ampliará las pensiones de 65 a 60 años. Es una carrera para ver quién compra más votos.
Inseguridad
La violencia debería haber afectado a los candidatos oficialistas. Nuestro País ha tenido el sexenio con el mayor número de homicidios y desapariciones en la historia. Los mexicanos dicen en las encuestas que la inseguridad es su principal preocupación, pero aun así afirman que votarán por los candidatos del Gobierno.
Sergio Sarmiento