Rosaura, la creación y la evolución

En un reciente video de solo ocho minutos se han recogido segmentos de una entrevista a la reconocida bióloga mexicana Rosaura Ruiz Gutiérrez (foto); algunos fragmentos de este documento circulan actualmente por Whatsapp aludiendo a algunos comentarios de la científica en relación a una pretendida pugna entre Creación y Evolución, los cuales adquieren en estos días mayor relevancia por varias razones: En primer lugar porque la académica ha sido anunciada por CSP para ocupar el cargo como titular de la nueva Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación, además porque el campo específico de trabajo e investigación de la doctora Ruiz ha sido precisamente la evolución de los seres vivos y especialmente por algunas definiciones que externa en ese video.

Aclaro que aquí no los anoto necesariamente de manera textual pero sí respetando el sentido conceptual y la idea central de los mismos, por ejemplo, que nosotros como especie somos iguales a los seres de cualquier otra especie y no somos el “pináculo” de los seres vivos, también que los animales y las plantas tienen los mismos derechos que nosotros a vivir aquí, añadiendo más adelante que por los nuevos criterios científicos queda muy separada la ciencia de la religión agregando que la educación no dogmática y no basada en la autoridad sino basada en la evidencia aleja la idea de Creación de la realidad; de hecho ella puntualiza que no fuimos creados (Cfr. https://www.youtube.com/watch?v=DKIQ0c09mNE). Desde luego, hay que analizar con criterio lo dicho por la doctora Ruiz, por ejemplo, ella no está diciendo que si los animales y las plantas tienen el mismo derecho que nosotros a la vida, pues entonces cometeríamos un crimen al matarlos y comérnoslos; el asunto no llega a eso. Debo aquí decir que en el video la investigadora menciona su respeto y derecho a llevar una vida de fe como creyente. Considero que estas y quizá algunas otras expresiones de la científica podrían confundir a más de uno, y por eso es muy conveniente acercarse a otras formas de ver las cosas. Mencionaré para ello cuatro científicos cuyas aportaciones hablan de su prestigio y valor. El biólogo molecular Kenneth Miller (arriba en la foto), profesor de Biología de la University Brown, es un cristiano católico de fe recia que ha promovido el entendimiento de la evolución en los Estados Unidos, es un crítico del creacionismo -es decir, de la intervención intencional de Dios en toda sucesión biológica por mínima que sea- e incluso es un crítico del llamado “diseño inteligente” y difunde, con énfasis y alto nivel, la compatibilidad total y necesaria de Creación y Evolución, y es que la idea misma de Evolución exige la idea de Creación pues lo que no existe primero no puede evolucionar después. ¿Cómo podría evolucionar algo que no existe?

Otro célebre es Francis Collins (foto, abajo izquierda), médico, biólogo molecular y doctor en Genética, que ha descubierto los genes asociados a no pocas enfermedades, conocimiento necesario para prevenirlas o curarlas, y fue el líder para el descifrado completo del genoma humano, lo que se considera el avance más significativo del siglo XX en las ciencias de la vida. Pues también es un cristiano de sólida fe, por cierto autor del reciente libro “El Lenguaje de Dios”, en el que se ve su aceptación de la Evolución, nada sorprendente, pues es el caso de miles de millones de creyentes convencidos de la Evolución.

Termino por mencionar a alguien no relacionado con la Biología, el físico Max Planck (foto, abajo derecha), Premio Nobel de Física que elaboró la teoría cuántica; cristiano y luterano también de una fe robusta y fuerte.

Son unos cuantos ejemplos de célebres que no viven un enfrentamiento entre Creación y Evolución, entre fe y ciencia, entre fe y razón. El concepto inglés “Theistic evolution” bien puede decirse como “Evolución con Dios”. No hay incompatibilidad.