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Momentos perfectos

Desafortunadamente, en estos tiempos la adicción a redes sociales y al Internet está provocando que las personas se pasen en promedio 4:37 horas viendo la pantalla, esto equivale a tres meses del año de jornada laboral.

Octavio  Ballesteros

Eugene O’Kelly es el director ejecutivo de la consultora KPMG, y en una revisión anual visita a su doctor para conocer los resultados. La cara del doctor lo expresa todo, y le brinda la noticia de que tiene un tumor que es inoperable, y le da la sentencia: 90 días de existencia.

Eugene analiza entonces su vida, y decide que esos 90 días serán los mejores de la misma. Se da cuenta de que muy pocas veces ha invitado a comer fuera a su mujer; que en los festivales escolares de su hija no estuvo presente por atender trabajo, y que además dejó de frecuentar a sus amigos por lo mismo.

Eugene se concentra entonces en pasar el resto de su vida creando lo que llamó momentos perfectos con familia y amigos, y así pasar el final de su existencia.

OTRA FORMA DE RIQUEZA

El dinero efectivamente es uno de los modos de riqueza para el individuo, pero no es el único modo de serlo. Tomemos el ejemplo de Nelson Mandela, el ex presidente de Sudáfrica que pasó 27 años en la cárcel por su actividad social contra la discriminación racial en su país.

Cuando sale libre participa por la presidencia de la nación y sale electo. A su toma de protesta invita muy especialmente al fiscal que lo mandó a la cárcel y que incluso deseaba pena de muerte para él, y al carcelero que lo vigilaba hasta cuando se bañaba.

Cuando le preguntaron a Mandela por qué los invitó contestó lo siguiente: “Porque no me interesaba seguir preso. Una respuesta que habla de un hombre que sin duda creció su mentalidad y madurez en la prisión.

OTRA RIQUEZA

Desafortunadamente, en estos tiempos la adicción a redes sociales y al Internet está provocando que las personas se pasen en promedio 4:37 horas viendo la pantalla, esto equivale a tres meses del año de jornada laboral.

Es demasiado tiempo, y las personas jóvenes cuando lleguen a los cincuenta, sesenta, setenta años de edad comprenderán de cómo han perdido el tiempo. En cambio los individuos que en su jornada cotidiana están concentrados en tres aspectos: Las tareas del día, la manera de como hacer mejor las cosas, y planear su futuro serán sin duda las que tendrá la riqueza de haber cumplido con la misión personal, y generar así esta riqueza interior de satisfacción por lo logrado.

Que los jóvenes supieran, que los viejos pudieran.

—  REFRÁN POPULAR

CONCLUSIÓN

Que no sea necesario pasar por la experiencia de Eugene para crear momentos perfectos en nuestra vida personal, familiar y social. Que la tarea de crecer como ser humano sea constante, y que el aprovechamiento del tiempo sea una característica de nuestro día a día. Entonces sí estaremos construyendo un auténtico patrimonio. Estimado lector, ¿te late?, ¡Feliz domingo!

Octavio F. Ballesteros Navarro. Socio del Despacho Asesores Ballesteros. Focalizados planes de ahorro y protección scalmente deducibles. WhatsApp 6621145869

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