El tiro en el aire

Si eres aficionado a la NBA o al basquet has de saber que poco antes de la mitad del siglo pasado en el basquet en Estados Unidos los jugadores tiraban a la canasta con los pies bien plantados en el suelo.

En esa misma época un jugador universitario llamado Kenny Sailors, que logró ser seleccionado nacional colegial y ser pionero de la NBA inventó el Jump Shot (tiro en el aire), y prácticamente revoluciona el mundo del basquet.

QUÉ OCURRE

Kenny empieza a utilizar el salto y en el aire tirar la pelota a la canasta, logrando así una ventaja sobre el jugador defensivo al tener más altura al hacer el tiro. Sailors así se convierte en el Michael Jordan de su época. Teniendo todo para ser un gran jugador profesional, sin embargo es llamado a formar parte del ejército norteamericano y le toca participar en la Segunda Guerra Mundial en Europa.

A su regreso lo que hace en lugar enrolarse en basquet profesional opta por irse con su esposa a Alaska, donde se dedica a vivir del outdoors, se dedica a la caza y a la pesca, organiza campamentos, monta a caballo, y logra formar una familia. Se olvidó del basquet por completo, y podemos afirmar que se construye una vida. Su esposa siendo ya adulta mayor empieza a sufrir de demencia senil, y al fallecer ella Kenny decide llevar ya una vida más tranquila y empieza a dedicarse a asesorar jóvenes practicantes del basquet y a servir a su comunidad de una manera muy discreta.

Poco antes de morir a Kenny le preguntan cuál es su “final four” en clara referencia al torneo donde los cuatro mejores equipos colegiales disputan la final del torneo universitario nacional en EU. Sailors contesta de la siguiente manera: “Dios, ser un buen marido, un padre cariñoso, y un buen infante de marina”. El basquet ni siquiera estaba en su lista. Sailors fallece a los 95 años de edad siendo un héroe para su familia, amigos y conocidos, y muchos que se han enterado de su historia.

CONCLUSIÓN

La historia de Kenny Sailors se comenta en el último libro de Robin Sharma, “La riqueza que el dinero no puede comprar”. Aquí lo que podemos destacar es que cuando realices una actividad o trabajo la hagas con todo el genio, esfuerzo y entusiasmo que puedas, y cuando ya no estés laborando llevar una vida tranquila, honorable y con sentido, porque el hecho de tener que trabajar para ganarte el pan de cada día no debe impedir que construyas una vida estupenda.

Estimado lector, ¿cuál es tu final four? ¡Feliz domingo!