Cobrar aranceles
Donald Trump y algunos de sus colegas sostienen que, si cobran impuestos suficientemente altos a las importaciones, no será ya necesario cobrarlos a los estadounidenses.
Los aranceles pagarán nuestra deuda y ¡harán a Estados Unidos rico otra vez!”,
Donald Trump, 2.01.2025.
Este 14 de enero el presidente electo de Estados Unidos publicó un mensaje en Truth Social, su red social, para quejarse de que el Gobierno de su país se ha dedicado a exprimir al pueblo con impuestos. Añadió que a través de “suaves y patéticos” acuerdos comerciales, la economía estadounidense ha generado “crecimiento y prosperidad al mundo mientras nos cobraban impuestos a nosotros. Es tiempo de que eso cambie”. Anunció que establecerá un “Servicio de Ingresos Exteriores” para recaudar aranceles.
Donald Trump y algunos de sus colegas sostienen que, si cobran impuestos suficientemente altos a las importaciones, no será ya necesario cobrarlos a los estadounidenses. Quieren reemplazar el Internal Revenue Service (IRS), el SAT estadounidense, con una institución que recaude aranceles y derechos a los extranjeros.
Los impuestos, sin embargo, siempre los pagan los residentes del país que los aplica. Los contribuyentes formales pagan el impuesto sobre la renta, pero los consumidores los aranceles. Si las empresas quieren sobrevivir están obligadas a trasladar sus costos a sus clientes, y los impuestos son uno de sus principales costos.
La idea de Trump de que Estados Unidos ya no es próspero porque comercia con otros países es falsa. No sólo la Unión Americana es uno de los países más ricos del mundo, sino que lo es, en parte, por su comercio. Entre 2010 y 2023 Estados Unidos tuvo una expansión de 34%, mientras que la Unión Europea avanzó sólo 21%. Muchos factores contribuyen a la mayor tasa de crecimiento estadounidense, pero uno es que su economía es más abierta.
Los países más prósperos suelen tener aranceles más bajos y menores barreras comerciales. Según la Organización Mundial de Comercio, Estados Unidos tenía en 2021 aranceles de 3.4% en promedio, mientras que la Unión Europea registraba 5.2%. El arancel de 25% que Trump quiere imponer ahora sería uno de los más altos del mundo, arriba del 19% de Argelia y Egipto o el 18.2% de Camerún. Quizá Trump quiere acercar a la Unión Americana al nivel de vida de esos envidiados países, pero debería más bien seguir el ejemplo de Singapur, que después de ser uno de los países más pobres cuando se hizo independiente en 1965 es hoy el segundo más rico del mundo, después de Luxemburgo, y el primero de Asia, medido por su producto interno bruto per cápita. Singapur, a propósito, cobra 0% de arancel.
Es cierto que hasta 1913, cuando se creó el impuesto sobre la renta en Estados Unidos con la 16ª enmienda constitucional, los aranceles eran la principal fuente de ingresos del Gobierno federal. Sin embargo, entre 1910 y 1916 el gasto federal era de apenas un 2% del PIB. Hoy se eleva a más del 36%. Pretender cubrirlo con aranceles sería imposible, pero además provocaría un desastre económico en Estados Unidos que se contagiaría al resto del mundo. Esto ocurrió ya con la Ley Arancelaria Smoot-Hawley de 1930, que fue uno de los mayores detonantes de la Gran Depresión.
El problema es que la ignorancia económica de Trump puede convertirse en política pública en la mayor potencia del mundo a partir del 20 de enero. Bajar el impuesto sobre la renta es buena idea, pero esa reducción no debe compensarse con incrementos en los aranceles. Es falso que estos los paguen los extranjeros; el costo lo cubren quienes viven y trabajan en Estados Unidos, porque se ven obligados a comprar productos más caros y de peor calidad. Lo sabemos bien los mexicanos, que durante muchas décadas vivimos con aranceles altos.
Beneficios
Coincido con la presidenta Sheinbaum quien dijo ayer que el libre comercio ha beneficiado a Estados Unidos, Canadá y México. México tenía en 2018 un arancel promedio ponderado por producto de 1.71% (Banco Mundial). El poco crecimiento económico que ha tenido México desde los años noventa ha sido producto del libre comercio. Hace bien la mandataria en defenderlo.
Sergio Sarmiento
Sigue nuestro canal de WhatsApp
Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí