Hay oposición
El sexenio de Vicente Fox empezó a abrir la grieta mexicana, la polarización. AMLO se nutrió de esto y hoy amplía la división
No fui a la marcha del domingo. No sentí el llamado de #ElINENoSeToca. Considero como muy necesaria una reforma electoral, pero no la que propone el Presidente. No fui porque no coincido con algunas organizaciones convocantes o porque desconocía a la mayoría de ellas. Sin embargo, seguí la marcha en medios y en redes, a través de los chats con amigos y familiares que sí asistieron, y me dio mucho gusto ver a la gente organizada y participativa. Seguí el discurso de José Woldenberg y me pareció sensato, sobrio y correcto. Finalmente se asoma en el panorama una oposición y esto es motivo de celebración.
El sexenio de Vicente Fox empezó a abrir la grieta mexicana, la polarización. AMLO se nutrió de esto y hoy amplía la división, pero sostengo que fue Fox con el desafuero quien la inició. Esa grieta no permite matices y escuchar a quien piensa diferente. Muchas de las personas que conozco y que participaron en la marcha no han leído la iniciativa de reforma al INE que propone el Presidente. Muchas otras no oyeron el discurso de Woldenberg o no sabían quién es él. Otras más fueron expresamente a “marchar contra AMLO y su Gobierno”. Cualquiera que haya sido el objetivo de las personas manifestantes es absolutamente válido. Hay que defender el derecho a la protesta y la disidencia como un valor absoluto e inseparable de la democracia. Una democracia sin contestación, sin oposición, sin diferencias, no es democracia. Así de claro y simple. Como límite claro a la defensa de la libertad de expresión está la promoción del discurso de odio y del racismo y clasismo.
Los movimientos sociales utilizan narrativas que buscan llamar la atención para la movilización, crear un sentido de urgencia. Lo que vimos ayer tal vez aún no sea un movimiento social, pero sí movilizó a miles con un llamado de defensa maximalista al INE. El #ElINENoSeToca se usó como una llamada de emergencia, como si estuviera realmente en riesgo la desaparición del instituto y como si Bartlett o Adán Augusto López fueran a organizar las elecciones del 2024. Sólo basta leer la iniciativa para ver que esto no es cierto. Sin embargo, la narrativa permeó y funcionó.
Los movimientos sociales nunca son un monolito. Siempre hay diferencias en estrategias, en posturas, en integración y en otros temas. Sin embargo, lo que vimos ayer empieza a articularse como un movimiento demasiado heterogéneo en el que caben el Frente Nacional por la Familia y el PAN junto al PRD, a un activista gay o a una joven feminista. La diferencia entre sus participantes es tal que lo mismo cupieron las cartulinas superfluas de “Soy totalmente INE” que el discurso necesario de Woldenberg, junto a manifestantes con cubrebocas que decían “Fuera López”. Mantener la cohesión de un movimiento con integrantes tan disímbolos es un reto a futuro.
Lo que vimos ayer fue indudablemente un éxito para la oposición, tan necesitada de mostrar vitalidad después de la traición del PRI. Lo que vimos ayer es tal vez el inicio de un lugar para el desencanto para quienes no encontraban manera de articularlo. Las semanas próximas pondrán a prueba si la marcha se traduce en incidencia y si cuaja para ser un movimiento más permanente.
Más que en AMLO, quienes participaron en la marcha deberán poner el ojo en “Alito” Moreno. La reforma electoral depende del PRI. Moreno ya traicionó una vez a sus aliados con la Guardia Nacional y aunque ayer mismo anunció que el PRI no votará a favor de la reforma electoral, su palabra no es confiable.
Finalmente, el oficialismo reaccionó muy mal a la marcha. El Presidente minimizó y descalificó con el mismo guión de siempre. Claudia Sheinbaum y Martí Batres no se diferenciaron del Presidente. Tal vez esto les ayude en Morena, pero aumenta la distancia entre ellos y el electorado descontento en la CDMX. La batalla electoral por la capital del País se torna más competitiva. Por lo pronto, ayer vimos que sí hay oposición y que no sólo es de tres partidos políticos. La reforma electoral del Presidente no debe pasar tal y como está y ayer vimos un poco del porqué.
Sigue nuestro canal de WhatsApp
Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí