¡Última hora! Dave Roberts envía al relevista Ryan Brasier como abridor de emergencia; Dodgers al borde de la eliminación ante Padres

SAN DIEGO, California.- Los Dodgers están contra las cuerdas luego de caer anoche ante los Padres, quedando a un solo descalabro de ser eliminados de la Serie Divisional. La presión en el dugout es palpable, y el mánager Dave Roberts encara un desafío mayúsculo: no cuenta con brazos frescos ni de confianza para el cuarto juego de la serie, en el que los Dodgers se juegan la temporada.

Faltan pitchers abridores

La baja de Clayton Kershaw ha sido un duro golpe para la rotación abridora. El zurdo se sometió a una cirugía de hombro el año pasado y apenas se reincorporó el 25 de julio. Sin embargo, un espolón óseo en el dedo gordo del pie izquierdo lo obligó a abandonar su apertura del 30 de agosto en la segunda entrada, dejándolo fuera por el resto de la campaña.

La otra esperanza en la loma de los Dodgers era Yoshinobu Yamamoto, quien llegó como refuerzo desde Japón. Yamamoto fue enviado a la lista de lesionados en junio y regresó para el primer duelo de la serie, pero fue vapuleado por la ofensiva de los Padres, que le fabricó cinco carreras en apenas tres entradas de labor.

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Ryan Brasier es el elegido

Ante la situación, Roberts ha optado por un bullpen day para el juego de hoy miércoles, confiando la apertura a Ryan Brasier, un serpentinero que se ha desempeñado más como cerrador que como abridor. La estrategia consiste en que Brasier cubra las primeras dos o tres entradas, dejando el resto a la artillería del relevo.

Brasier, derecho con amplia experiencia a sus 37 años, acumula 10 salvamentos y 63 holds en las Grandes Ligas. Sin embargo, abrir no le es ajeno; este año ha subido a la loma como abridor en 4 ocasiones con los Dodgers, y hoy buscará extender la serie.

Su paso por la Liga Mexicana del Pacífico

En México, Brasier es bien recordado por su paso por la Liga Mexicana del Pacífico, donde lanzó para los Naranjeros de Hermosillo en la temporada 2012-13, conocida como la del “Último Capítulo” del Estadio Héctor Espino.

A sus 24 años, se ganó el puesto de cerrador y salvó 12 juegos, con una efectividad de 2.45 y 27 ponches en 24 apariciones. Gracias a su desempeño, logró su debut en las Grandes Ligas con los Angelinos poco después.