Emilio Azcárraga, dueño del Club América, responde a las acusaciones de compra de árbitros

En una reciente entrevista con David Faitelson, periodista de TUDN, Emilio Azcárraga, dueño de Televisa y del Club América, abordó las especulaciones en torno a la supuesta compra de árbitros por parte del conjunto azulcrema, un tema que ha generado controversia entre aficionados y críticos del futbol mexicano.

Faitelson, conocido por sus incisivas preguntas, no tardó en tocar un tema candente: las acusaciones de que el América influiría en las decisiones arbitrales a su favor. Azcárraga, sin titubeos, desestimó estas acusaciones, señalando que tales comentarios son solo excusas de quienes no cumplen con su tarea dentro del campo.

Creo que es un buen pretexto para la gente que no hace su trabajo bien echarle la culpa al arbitraje de lo que no hiciste en la cancha”, afirmó el propietario del Club América.

Faitelson, como era de esperarse, continuó con la línea de cuestionamientos, sugiriendo que este tipo de rumores también se dan en otros equipos grandes a nivel mundial, mencionando al Real Madrid como ejemplo.

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¿Qué opina André Jardine ante el presunto favoritismo del arbitraje sobre el América?

¿Pero no es algo que va incluido en los equipos grandes? También en el Real Madrid se habla de eso", reformuló el periodista.

La respuesta de Azcárraga fue directa y contundente.

Cuando a nosotros nos ha pasado, y por eso es lo que te digo es, tú tienes que meter los goles, tú tienes que meter más goles que el otro. Eso es”, sentenció.

Además, hizo énfasis en que, si bien es común que dentro del club se sientan afectados por las decisiones arbitrales, eso no justifica las acusaciones de favoritismo.

Si tú le preguntas a mis jugadores y al cuerpo técnico y directivos, seguramente te dicen que los árbitros están en contra del América. Entonces yo creo que hay que sacar esa idea porque creo que obra mal y no construye nada que hay un favoritismo no comprobado”, agregó Azcárraga.

La entrevista dejó claro que Azcárraga prefiere centrar la conversación en la capacidad de su equipo para superar cualquier obstáculo, sea dentro o fuera del campo, sin caer en teorías conspirativas que no tengan fundamento. Para el dueño del Club América, el futbol se juega con goles, no con excusas.