Cómo iniciar en el mundo de la inversión: Guía para principiantes
Inicia con montos pequeños para familiarizarte con la plataforma elegida y consulta periódicamente tu portafolio para ajustar las inversiones conforme a los cambios en tus metas o situación financiera
MÉXICO.- Iniciar en el mundo de la inversión puede parecer un desafío abrumador para quienes nunca han explorado esta opción.
Sin embargo, el ahorro por sí solo a menudo no es suficiente para cumplir metas financieras a largo plazo, y la inversión se convierte en una herramienta fundamental para hacer crecer el capital y combatir la inflación.
A continuación, te damos algunas pautas para comenzar a invertir de forma segura y eficaz.
1. Establecer Metas Financieras Claras
Antes de hacer cualquier inversión, el primer paso es definir claramente los objetivos financieros. Preguntas como “¿Para qué quiero invertir?”, “¿En cuánto tiempo espero ver resultados?” y “¿Cuánto riesgo estoy dispuesto a asumir?” son fundamentales.
Según la CONDUSEF, las metas pueden dividirse en corto, mediano y largo plazo, y cada una de ellas requerirá diferentes tipos de instrumentos de inversión.
Por ejemplo, una meta de largo plazo, como el ahorro para la jubilación, puede tolerar inversiones de mayor riesgo que una meta de corto plazo, como un fondo para vacaciones.
Consejo: Usa una calculadora de metas financieras o consulta con un asesor para determinar el capital necesario y el rendimiento que necesitarías obtener en cada plazo.
2. Comenzar con Instrumentos de Bajo Riesgo
Para los principiantes, los expertos en finanzas personales, como los de BBVA México, sugieren iniciar con instrumentos de bajo riesgo, como los Certificados de la Tesorería de la Federación (Cetes) o fondos de inversión de renta fija.
Estos productos ofrecen rendimientos seguros y predecibles, lo cual permite que los nuevos inversionistas se familiaricen con el proceso sin exponerse a grandes pérdidas.
Alternativas recomendadas: Plataformas como Cetes Directo permiten invertir directamente en bonos del gobierno mexicano desde montos tan bajos como 100 pesos. Esta es una buena manera de empezar a ver cómo funciona el interés compuesto y experimentar con inversiones seguras.
3. Diversificar para Minimizar Riesgos
Una vez que se tiene algo de experiencia en inversiones de bajo riesgo, es importante comenzar a diversificar el portafolio. La diversificación es una estrategia que ayuda a reducir el riesgo al repartir el capital en distintos tipos de activos, como acciones, fondos de inversión, y bonos corporativos.
El Economista recomienda destinar solo un porcentaje del portafolio total a inversiones de mayor riesgo, como acciones de empresas emergentes, para maximizar el potencial de ganancias sin comprometer la estabilidad del capital.
Consejo práctico: Considera dividir tus inversiones en una proporción de 80% en activos de bajo riesgo y 20% en activos de riesgo moderado o alto. A medida que te sientas más seguro, puedes aumentar la proporción de activos de riesgo, según tus objetivos.
4. Usar Herramientas y Asesoría Financiera
Invertir puede parecer un proceso complejo, por lo que aprovechar las plataformas de inversión digital y contar con asesoría financiera puede hacer la diferencia.
Herramientas como GBM+, Flink y Bursanet permiten invertir en la Bolsa Mexicana de Valores con montos accesibles y ofrecen recursos de aprendizaje para principiantes.
Además, es recomendable consultar con asesores financieros certificados, que pueden guiarte en la elección de productos financieros acordes a tus necesidades y nivel de riesgo.
Consejo: Inicia con montos pequeños para familiarizarte con la plataforma elegida y consulta periódicamente tu portafolio para ajustar las inversiones conforme a los cambios en tus metas o situación financiera.