Banxico ajusta meta inflacionaria al 2026 ante posibles aranceles de Estados Unidos

MÉXICO.- El Banco de México (Banxico) decidió posponer su meta de alcanzar una inflación baja y estable del 3% al tercer trimestre de 2026, debido al riesgo de que el gobierno del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, implemente aranceles a las importaciones provenientes de México.

Inicialmente, Banxico proyectaba cumplir esta meta para finales de 2025, pero el reciente anuncio de política monetaria destacó que la incertidumbre generada por las posibles medidas comerciales afecta las previsiones económicas.

Impacto de los aranceles y riesgos inflacionarios

Según el comunicado, la implementación de aranceles podría generar presiones inflacionarias tanto en México como en Estados Unidos. Entre los principales riesgos al alza para la inflación, Banxico destacó:

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• La persistencia de la inflación subyacente.
• Una mayor depreciación del peso mexicano.
• Incrementos en los costos de producción.
• Afectaciones climáticas y disrupciones derivadas de conflictos geopolíticos o comerciales.

Por otro lado, los riesgos a la baja incluyen una actividad económica más débil de lo anticipado y un menor traspaso de presiones de costos al consumidor.

Panorama económico y política monetaria

La junta de gobierno de Banxico recortó, de manera unánime, la tasa de interés en 25 puntos base, cerrando el año en un nivel del 10%, en línea con el avance del proceso desinflacionario.

Aunque reconoció que el panorama inflacionario muestra señales de mejoría gracias a la desaceleración de la inflación subyacente, Banxico enfatizó que el balance de riesgos sigue inclinado al alza.

De cara al futuro, el banco central no descarta ajustes más significativos en la tasa de referencia, siempre manteniendo una postura restrictiva para garantizar la estabilidad económica.

Contexto global y local

El aplazamiento de la meta inflacionaria se da en un entorno marcado por las consecuencias de la pandemia y la guerra en Ucrania, factores que han generado choques económicos profundos. Además, las tensiones comerciales con Estados Unidos podrían acentuar las presiones sobre la economía mexicana, ya afectada por la depreciación del peso y los altos costos de producción.

Con este panorama, Banxico buscará equilibrar las políticas monetarias para mitigar los riesgos y continuar avanzando en su objetivo de estabilidad de precios.