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Esta es la proyección en crecimiento económico para América Latina en 2025

El bajo crecimiento promedio de América Latina y el Caribe durante la última década señala desafíos estructurales que dificultan la capacidad de las economías para alcanzar un desarrollo sostenible.

La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) estima que la economía de la región crecerá un modesto 2.4% en 2024, destacando que en la última década (2015-2024) el promedio de crecimiento anual ha sido de apenas 1%, con un estancamiento del PIB per cápita.

Factores clave del estancamiento económico

  • Baja capacidad para crecer: La región se encuentra atrapada en una dinámica de crecimiento limitada, caracterizada por una dependencia del consumo privado como principal motor, mientras que la inversión ha tenido un peso significativamente menor.
  • Problemas estructurales: La Cepal advierte que las economías de la región necesitan una transformación para salir de esta trampa de bajo crecimiento, impulsando políticas que fomenten la inversión productiva y la diversificación económica.

Proyecciones de crecimiento por país en 2024

  • Mayor crecimiento:
    Guyana:
    13.6%, impulsado principalmente por su floreciente industria petrolera.
    República Dominicana: 4.6%, gracias a un fuerte dinamismo en sectores como el turismo, las remesas y la construcción.
    Argentina: 4.3%, debido a una leve recuperación tras años de contracción económica.
  • Menor crecimiento:
    México:
    1.2%, reflejando un crecimiento moderado influenciado por la desaceleración económica global y la baja inversión.
    Cuba: -0.1%, afectado por las restricciones económicas y el difícil acceso a financiamiento.
    Haití: -0.5%, marcado por crisis políticas, sociales y económicas persistentes.

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El bajo crecimiento promedio de América Latina y el Caribe durante la última década refleja desafíos estructurales que dificultan la capacidad de las economías para alcanzar un desarrollo sostenible.

Para revertir esta tendencia, será fundamental:

  1. Aumentar la inversión productiva en infraestructura, tecnología y capital humano.
  2. Fortalecer la diversificación económica, reduciendo la dependencia de sectores tradicionales.
  3. Impulsar políticas públicas inclusivas que aborden desigualdades sociales y económicas.

La Cepal subraya la importancia de adoptar estrategias integrales que fomenten el crecimiento económico a largo plazo y fortalezcan la resiliencia de la región frente a choques externos.

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