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Conoce la historia del hombre que inventó la máquina de donde nacen las tortillas

Celorio es el creador de la tortilladora moderna, de la cual, se presume que existen más de 100 mil en el territorio mexicano hoy en día.

Conoce la historia del hombre que inventó la máquina de donde nacen las tortillas

Al reconocido Don Fausto Celorio se le atribuyen más de 150 creaciones, entre ellas, una maquinaria vital para la producción de tortillas en México

Todos los días las comes y sin embargo conoces poco del proceso que vivieron para llegar hasta tu mesa. Si alguna vez te has preguntado quién inventó una forma de que las tortillas que consumes sean tan buenas y se pueda surtir de tantas a los mexicanos, te invitamos a conocer la historia del inventor Fausto Celorio, “Don”, como se le conocía afectuosamente.

Comienza en el siglo pasado, cuarenta años después de que Evarardo Rodríguez y Luis Romero crearan la primera máquina para hacer tortillas en 1904. En una fecha cuando la mayoría de las tortillas se preparaban a mano en los comales y metates. Las pocas industrias que habían elaborado maquinaria para crear tortillas las hacían sin gracia y con forma cuadrangular. Fue entonces que Fausto Celorio inventó su máquina, hecha con el propósito de producir tortillas de manera eficiente y conservando su sabor.

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Tortilladora moderna

Celorio es el creador de la tortilladora moderna, de la cual, se presume que existen más de 100 mil en el territorio mexicano hoy en día. Pero llegar hasta ese punto no fue fácil, habiendo tenido que atravesar diversos factores y circunstancias cuando era Don Fausto era joven. Incluso, tenía que hacer los adelantos de sus invenciones a escondidas, para evitar represalias de las mujeres que trabajaban haciendo tortillas, quienes desaprobaban sus intereses.

En 1947, Fausto Celorio lanzó al mercado su primera máquina tortilladora, una versión que no le generaba muchas ventas, salvo una por mes en el mejor de los casos. En esta máquina, la tradicional mezcla de maíz con cal viva y agua era procesada de la siguiente manera:

  • Se transportaba la mezcla de maíz a una molienda donde se le da forma de masa.
  • Dentro de la máquina esta masa se aplasta, se lamina y es segmentada para adoptar la forma de un disco.
  • Ya separada en discos, la tortilla es llevada hasta tres hornos a temperatura adecuada.

Todas estas partes, en conjunto, generaban una tortilla cada 60 segundos, lo cual era una mejora substancial si la comparamos con los laboriosos tiempos de una tortilla hecha a mano. Sin embargo, este prototipo requería de mejoras, por lo que a principios de los cincuenta aparece Alfonso Gándara, ingeniero del Instituto Politécnico Nacional, para perfeccionar el producto.

Un gran éxito que cosechó

Tras algunos ajustes, las ventas de Don Celorio incrementaron a 40 piezas cada mes. Luego de esto el inventor mexicano no dejó de perfeccionar su maquinaria, alternando el tipo de tuberías internas con tal de mejorar la temperatura. En 1963 ya producía tortillas con más textura gracias a su máquina dúplex, con números de hasta 132 kilogramos de tortillas en una hora.

Para 1973 ya tenía en su catálogo una variante de su invento que reducía significativamente los costos, puesto que usaba 50% menos de gas para sus jornadas. Esta versión producía la increíble cantidad de 200 kilos de tortillas cada hora. Y no contento con ello, para 1991 hizo otro modelo de menores dimensiones que generaba hasta 131 kilos.

Don Fausto Celorio murió a la edad de 71 años, con un imperio dentro de una de las industrias más antigüas e importantes para los mexicanos, así como también un legado que incluso hoy, acompaña las meriendas de millones de mexicanos todos los días.

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