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Hace un año, Sarita Sosa se ganó el odio de México

La hija de José José, a la fecha, es una de las personas más repudiadas del País por el escándalo en torno a la muerte del “Príncipe de la Canción”.

CIUDAD DE MÉXICO.- Hace un año, el mundo lloraba la muerte de José José, dejando una profunda huella que quedaría marcada en los corazones de los mexicanos.

Sin embargo, a pocas horas de anunciarse su fallecimiento el 28 de septiembre de 2019, fue otra persona quien acaparó la atención de ese día: Sara Sosa.

Desde aquel día, la hija de José José, fruto de su segundo matrimonio con Sara Salazar, se convirtió en una de las personas más odiadas de México y su sola mención en redes sociales amerita cientos de críticas y burlas en contra suya.

PERO ¿POR QUÉ ES TAN ODIADA?

Todo comenzó en 2018, cuando Laura Núñez, ex mánager de José José y su amiga íntima, acusó a Sarita de tener secuestrado a José José en Miami, quien enfrentaba el cáncer de páncreas en aquel entonces.

La joven de 25 años se lo había llevado de México y desde entonces no permitía que nadie se acercara al cantante, ni siquiera sus hijos mayores José Joel y Marysol Sosa, quienes no pudieron convivir con su padre en sus últimos meses de vida.

Laura también denunció que Sarita, en febrero, obligó a que el “Príncipe de la Canción” le firmara un documento donde le cedía sus regalías, a base de chantajes emocionales y presión, modo en que, supuestamente, conseguía todo lo que deseaba.

EL DÍA EN QUE SE GANÓ EL ODIO DE MÉXICO

Lo que convertiría a Sarita en la “mujer más odiada de México” junto a Karla Panini y Tano Elizalde, fue lo que hizo aquel 28 de septiembre de 2019, día en que murió José José en Miami.

La hija menor del llamado “Príncipe de la Canción” comenzó a protagonizar los titulares de las noticias luego de que sus hermanos mayores, Marysol y José Joel (hijos de Anel Noreña), aseguraran que la joven había “secuestrado el cuerpo de su padre”.

Los hijos mayores del cantante, a 12 horas de darse a conocer su fallecimiento, aseguraron no tener información del paradero de sus restos, ni tampoco noticias de las circunstancias en que había muerto. Trataban de comunicarse con Sarita, quien no les contestaba el teléfono y les había bloqueado los mensajes.

Marysol y José Joel viajaron de México a Miami, y acudieron a la funeraria donde se supone que José José seria velado. Sin embargo, al hablar con los trabajadores del lugar, dijeron no tener información sobre un velorio en las próximas horas.

Ambos hicieron la denuncia a los medios y las autoridades competentes, pidiendo en cámara a su hermana que se comunicara pronto con ellos pues no sabían a dónde tenían que ir.

La antipatía y repudio a Sarita se hizo más palpable en redes sociales cuando, esa misma noche, la joven apareció en televisión, ofreciendo una entrevista. Ahí, se le vio arreglada y maquillada para la ocasión, hablando de su sentir sobre José José y asegurando que su último deseo antes de morir era que ella hiciera una carrera musical.

Esto último fue motivo suficiente para que comenzaran a “crucificarla” en Internet, criticando el hecho de que tuviera tiempo para aparecer en televisión dando entrevistas, y no para hablar con sus hermanos sobre el paradero del cuerpo de su padre; incluso la acusaron de haber fingido sus lágrimas en cámara. Los ataques fueron de memes hasta mensajes de odio, asegurando que, si se lanza como cantante, jamás la apoyarían en México.

Tras casi dos días recorriendo Miami, finalmente José Joel y Marysol se encontraron con Sarita en la primera funeraria a la que acudieron, donde se les había prohibido dar información sobre José José.

Los hermanos aseguraron que interpondrían una demanda contra su hermana, quien preparaba todo para cremar el cuerpo de su padre y que permaneciera en México, cuando su voluntad había sido ser enterrado en el Panteón Francés de la Piedad en la Ciudad de México junto a la tumba de su madre.

La situación mediática escaló a tal nivel que la Embajada de México en Estados Unidos tuvo que intervenir, tras las miles de exigencias de los internautas mexicanos de que José José fuera velado en su País natal.

Al final se consiguió que parte de las cenizas de José José fueran trasladadas a México, donde fueron depositadas en un féretro de bronce con chapa de oro de 24 kilates, que recorrió Bellas Artes y la Basílica de Guadalupe antes de ser enterrado en el panteón.

¿Y QUÉ HA SIDO DE SARITA?

El odio contra la hija de José José nunca cesó y a la fecha sigue palpable (especialmente este día). La joven ha tenido varios intentos por lanzar su carrera musical en Estados Unidos. Ha sido invitada a eventos en homenaje al cantante, y ofreció un concierto vía Youtube el Día del Padre, el cual recibió miles de mensajes de odio.

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