Ex integrantes de "Exatlón México" revelan cómo fue vivir en la Cabaña

MÉXICO.- El reality show de "Exatlón México" demostró ser uno de los programas que cautivó al público, y es que la intriga y la emoción está presente en cada una de las transmisiones, pero sobre todo en cada domingo de eliminación donde los televidentes esperan que su atleta favorito no tenga que despedirse de su equipo.

En definitiva, parece que la quinta edición del show es de los favoritos de la audiencia, pues las competencias entre Guardianes y Conquistadores cada vez son más intensas y llenas de drama, ya que la tensión entre los equipos a veces desata fuertes peleas y, por lo tanto, bajo desempeño en alguno de los integrantes.

Los conflictos entre los participantes están siempre presente en las emisiones y en los medios de comunicación, pero lo que más llamó la atención de todos es que los primeros eliminados no dudaron en revelar los oscuros secretos que ocurrieron mientras vivían la experiencia completa de participar en "Exatlón México".

Fue durante una entrevista exclusiva con el canal de Youtube, el Megáfono, que el primer eliminado de Conquistadores, Jonathan García y Mario Orozco comentaron algunos momentos irreales que vivieron durante su estancia en la cabaña, donde aseguran que es mucho más complicado de lo que parece ser en cámara.

Por su parte, Mario confesó que los contrincantes se aprovecharon de la lesión que sufrió en el hombro para atacarlo, incluso se involucró en una pelea de golpes con Ramiro. Mientras que Jonathan admitió que, en ocasiones, pasaban mucha hambre por la falta de comida que había en sus respectivas cabañas.

El tenista explicó que cuando despertaban había muy poca comida para todos los integrantes: "Teníamos dos huevos duros, una rebanada de pan, un pedazo de queso y un pedazo de jamón, pero pedazos te digo láminas", aseguró.

Lo que más impresionó de su revelación fue que, durante la charla admitió que algunos de los integrantes de los Conquistadores se asomaban a los botes de basura para ver si había algún alimento disponible.

De verdad que de repente pasábamos por los botes de basura, no es broma, y nos asomábamos a ver si había algo", confesó García.