La velocidad ideal para caminar y bajar de peso de manera efectiva
La velocidad y la intensidad de las caminatas pueden influir significativamente en los resultados de pérdida de peso.
Caminar es una de las formas más accesibles y efectivas para perder peso, pero el ritmo de la caminata juega un papel crucial en los resultados. Aunque cualquier ritmo puede ser beneficioso para la salud general, alcanzar una velocidad adecuada es fundamental para maximizar los beneficios en la pérdida de peso.
Como actividad aeróbica de bajo impacto, caminar no solo ayuda a quemar calorías, sino que también mejora la salud cardiovascular sin imponer un gran estrés en las articulaciones. Esta accesibilidad hace que caminar sea una opción atractiva para quienes desean perder peso de manera constante y sin complicaciones.
Michelle Stanten, entrenadora personal, señala que establecer un tiempo objetivo para recorrer distancias puede optimizar los resultados y aumentar la motivación. Es recomendable monitorear el tiempo dedicado, el número de pasos dados y la velocidad para ajustar el entrenamiento de manera efectiva.
Te puede interesar: 8 sencillos tips para acelerar tu metabolismo y adelgazar
¿Cuál es la velocidad ideal para caminar?
Para quienes están comenzando, tienen sobrepeso o enfrentan dificultades físicas, se sugiere iniciar con caminatas cortas y ligeras, aumentando gradualmente la intensidad. Caminar un kilómetro en 9 a 14 minutos es una meta adecuada, y si se tarda más, se recomienda dividir la caminata en tres sesiones cortas diarias. Con el tiempo, incrementar el ritmo y adoptar técnicas como la flexión de brazos y una postura adecuada contribuirá a mejorar la velocidad y los resultados.
La Organización Mundial de la Salud recomienda entre 150 y 300 minutos de ejercicio moderado o 75 a 150 minutos de ejercicio intenso semanalmente. No obstante, un estudio de la Universidad de Harvard sugiere que para prolongar la vida hasta en un 30%, es ideal realizar entre 300 y 600 minutos de ejercicio semanal. Esto equivale a caminar entre 45 minutos y una hora y media al día.
Una técnica adicional para aumentar el gasto calórico es el Rucking, que implica caminar con una mochila con peso. Este método no solo incrementa la intensidad del ejercicio, sino que también fortalece los músculos de la espalda, hombros y piernas, mejorando la capacidad cardiopulmonar. Es esencial escuchar al cuerpo, no excederse y ajustar el peso y la dificultad del recorrido gradualmente para mantener una buena postura y distribución del peso.