Hugh Jackman se arrepiente de haber rechazado estos dos papeles

Hugh Jackman, reconocido por su papel icónico como Wolverine en las películas de X-Men y por su destacada trayectoria en Hollywood, ha revelado detalles sobre decisiones que marcaron su carrera. En una entrevista con Howard Stern en 2023, el actor australiano compartió que rechazó interpretar a James Bond y al abogado Billy Flynn en el musical ‘Chicago’, aunque admite que uno de estos rechazos sigue generándole dudas.

Jackman confirmó que fue considerado para el papel del agente 007 cuando los productores buscaban un nuevo rostro para la franquicia de James Bond. Sin embargo, en ese momento, el actor ya estaba consolidando su participación en la saga de X-Men y, siguiendo el consejo de su amigo Russell Crowe, decidió no involucrarse en dos franquicias al mismo tiempo. Esta decisión le permitió diversificar su carrera, algo que él valora profundamente. Finalmente, el papel de Bond fue para Daniel Craig.

Por otro lado, Jackman lamenta haber rechazado el papel de Billy Flynn en ‘Chicago’ (2002), una película que se convirtió en un éxito rotundo, ganando múltiples premios Oscar. El actor explicó que en ese entonces tenía 30 años y consideró que era demasiado joven para interpretar al carismático abogado, un personaje que finalmente fue interpretado por Richard Gere. Jackman admitió que, tras ver la película en Nueva York, pensó que había cometido “el mayor error de su carrera”.

Razones válidas

A pesar de su arrepentimiento por no haber aceptado el papel en Chicago, Jackman sigue convencido de que su decisión estuvo basada en razones válidas. “Pensé que era demasiado joven para lograrlo”, comentó, reconociendo que su percepción sobre los musicales cambió con el tiempo. Posteriormente, su participación en películas como ‘Los Miserables’ y ‘El gran showman’ consolidó su reputación en este género.

La crítica de ‘Chicago’, un musical basado en la obra de Broadway de Bob Fosse, destacó su impacto en el cine musical contemporáneo. Con números deslumbrantes y una narrativa satírica sobre la justicia, la prensa y el matrimonio, la película fue elogiada por expertos como Roger Ebert, quien la calificó como “un espectáculo de canciones y bailes deslumbrantes”. Jackman confesó que al ver la respuesta del público a la película, comprendió el alcance de lo que había dejado pasar.