Crítica de Emilia Pérez: Una película insensible y banal que ofende a la cultura mexicana, dice Kristoff Raczynski

En el reciente estreno de Emilia Pérez en México, la reacción no se hizo esperar, y las críticas no han sido nada favorables. La película, protagonizada por Selena Gómez y dirigida por un equipo que no comprende el contexto cultural mexicano, ha generado un aluvión de comentarios negativos. Los críticos, como Kristoff Raczynski, han calificado la película como una “mafufada”, un desastre cinematográfico que trivializa temas importantes y respeta de manera superficial la cultura mexicana.

Un desastre cinematográfico

Desde el inicio, la película fue considerada por Raczynski una porquería, un trabajo insustancial que no cumple con los estándares básicos del cine. A pesar de la nominación a 13 premios Óscar, la trama ha sido rechazada por su falta de coherencia y profundidad. El protagonista, un personaje malvado que pretende transitar de hombre a mujer, se enfrenta a problemas que, según los críticos, no son ni bien tratados ni profundizados. A lo largo de la película, los diálogos son confusos y mal escritos, con conjugaciones incorrectas y un español que resulta incluso doloroso de escuchar, indica el experto en cine.

La actuación de Selena Gómez también fue duramente criticada por Kristoff. Se quejó de que su interpretación no es creíble, especialmente en escenas emotivas donde se le ve llorar sin lágrimas y recitar diálogos vacíos. Otros personajes, como la abogada que la acompaña en su proceso de transición, también fueron objeto de burlas debido a su falta de desarrollo y la superficialidad con la que se presentan.

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Un insulto a la cultura mexicana

Uno de los aspectos más señalados por Raczynski es la falta de respeto hacia México y sus costumbres. La película, dice, utiliza clichés y representaciones superficiales de la cultura mexicana, como mariachis con luces LED, imágenes de la Virgen de Guadalupe y una muestra reduccionista del país. La representación del idioma y las tradiciones mexicanas es tan pobre que muchos se sintieron insultados. Además, la trama no está ambientada en México, lo que refuerza la desconexión de los realizadores con la realidad del país.

La crítica también apunta a la apropiación cultural, ya que actores que no pertenecen a la cultura mexicana interpretan personajes que deberían ser representados por personas con una conexión genuina con esa cultura. La falta de autenticidad es otro factor que agrava la situación.

Una película insensible con temas graves

Además de la forma en que se representa a México, la película es acusada de trivializar temas importantes como la transición de género y la desaparición forzada. El enfoque de la película es tan superficial que se vuelve risible, indican, convirtiendo un tema tan serio en un espectáculo vacío y sin propósito. No hay un esfuerzo por entender ni por representar la complejidad de estos temas, y la narrativa se limita a un discurso simplista y falto de profundidad.

Una trama incoherente y sin sentido

La historia en sí misma carece de coherencia, afirma Kristoff Raczynski. El personaje principal, un criminal que busca redención mediante la cirugía de cambio de sexo, es tratado como un “malo malote” que, al convertirse en mujer, se convierte en una persona “buena”. Este planteamiento no tiene base sólida ni desarrollo adecuado. La película intenta manipular al espectador, haciéndole creer que las atrocidades cometidas por el personaje deben ser perdonadas simplemente porque se ha sometido a una operación de cambio de sexo. Esta redención forzada es una de las críticas más duras, ya que no se construye de manera que el público pueda realmente empatizar con el personaje.

El peor insulto: tener que pagar por verla

Lo más indignante para Raczynski fue el hecho de que esta película se proyectara en cines en México, mientras que en Estados Unidos estaba disponible gratuitamente en Netflix. El crítico considera esto un “robo”, ya que la película no vale lo que se paga por verla. Este doble estándar de distribución ha agravado aún más la percepción negativa de la película.

Conclusión: Un insulto a México y a la inteligencia del público

Emilia Pérez no solo ha sido un fracaso cinematográfico, s

ino también una obra insensible que no respeta a la cultura mexicana ni a los temas serios que intenta abordar, menciona Kristoff Raczynski. “Con una trama absurda, personajes mal desarrollados y un tratamiento superficial de la transición de género y la desaparición, esta película se ha ganado a pulso el título de una de las peores propuestas del cine en los últimos años. Lejos de ser un arte que invita a la reflexión, Emilia Pérez se presenta como una obra vacía, banal y ofensiva", detalla.