Así es el lujoso refugio "zen" de Matt Damon en California

ESTADOS UNIDOS.- Matt Damon ha sido una de las últimas estrellas que ha decidido cambiar de hogar. Al parecer, el actor y su esposa, Luciana Barroso, quieren hacer de Nueva York su nuevo lugar de residencia, y para ello han sacado al mercado su espectacular mansión de Pacific Palisades, en California.

Un refugio 'Zen' que, tal y como explica la propia inmobiliaria encargada de su venta (The Agency), es toda una obra arquitectónica, a la que no le falta detalle. 7 habitaciones, 10 baños y una amplia piscina son sólo algunos de los atractivos de la vivienda, por la que el intérprete pide más de 17 millones de euros (21 millones de dólares).

Amplitud y luminosidad

Un amplio recibidor da la bienvenida al que hasta ahora ha sido el hogar de Matt Damon y su familia. Una estancia, 'de paso', que anticipa lo que se puede esperar de la mansión: altos techos de madera, y una gran luminosidad, debido, en gran parte, a los amplios ventanales que rodean toda la propiedad, y que dejan también ver toda la naturaleza que la compone.

A ambos lados de la puerta (totalmente acristalada) nos topamos con dos grandes jarrones oscuros, con ramas naturales, y una alfombra de estilo persa.

Espacios que "se funden"

Aunque la vivienda ya es amplia de por sí, para potenciar todavía más esa sensación, se ha apostado por espacios conectados entre sí, en los que no hay ninguna puerta o pared que los separe. Así, en esta zona, que presenta unas largas escaleras, que integran el piso inferior con el superior, y deja paso a un acogedor salón y, un paso más allá, al comedor.

Todo ello con un estilo muy elegante. Por un lado, la madera del techo y la del suelo (un parquet brillante), y por otro, algunos detalles de diseño. Basta con observar los dos taburetes situados bajo la mesa de madera gris, con un jarrón a juego.

Al calor del fuego

Bajo las escaleras, se abre una pequeña sala de estar, compuesta por un sofá aterciopelado, en forma de 'L', una pequeña butaca gris, y una mesa de centro, de madera, baja, que miran directamente a la chimenea. Ésta se encuentra instalada en una pared de piedra que, aunque combina diferentes tonalidades, predomina el gris que también conforma la estructura donde está el fuego.

Por último, cabe destacar también la alfombra aterciopelada, grisácea, que protege parte del suelo.

Un comedor "al natural"

A tan sólo un paso de la anterior sala de estar se halla el comedor, delimitado por otra alfombra aterciopelada y grisácea (similar a la del salón).

En estancias como ésta, la protagonista suele ser la mesa principal, alargada, que ha sido acompañada con varias sillas aterciopeladas blancas. Sin embargo, en esta ocasión se ha querido dar más valor a la naturaleza que al mobiliario. Tanto es así que se ha colocado un árbol en una esquina, y los amplios ventanales, además de permitir el paso de la luz natural, ofrecen unas vistas inigualables al frondoso espacio exterior. De hecho, éste también se refleja en el espejo vertical, de marco oscuro, que se ha colgado en el lateral.

Un toque industrial

Si el comedor era un pequeño refugio que conectaba con la naturaleza, al entrar en la cocina nos encontramos con un rincón que incluye algunos detalles que evocan al estilo industrial. Sobre todo, por la elección de mantener el color metalizado de algunos electrodomésticos, pero también al incorporar tres lámparas de techo de la misma tonalidad.

La estancia está claramente dividida en dos espacios, divididos por una isla central, que consta de una parte con encimera de mármol. Sin embargo, su principal material es la madera, que también reviste otras piezas del mobiliario. A un lado, el área de los fogones, con esa encimera de mármol clara y varias vitrinas claras, que dejan a la vista algunos utensilios.

Al otro, una mesa pequeña de madera, con pequeñas butacas grisáceas, que se levantan sobre un suelo compuesto por baldosas de tonos tierra, que parecen de exterior.

Una sala integrada en la cocina

En la misma área de la cocina, a tan sólo un paso, se abre esta acogedora sala, que, a su vez, conecta con la parte exterior a través de una gran puerta acristalada.

La pieza principal de este rincón es el sofá aterciopelado, de color crema, que cuenta con un puf y una butaca a juego. Al lado, el actor ha colocado un baúl vintage, que se convierte en una mesa auxiliar perfecta para dejar algunas velas y otros detalles decorativos, mientras que en el suelo, se ha colocado una alfombra con efecto 'desgastado'.

Con guiños a la cultura oriental

Vista desde otra perspectiva, descubrimos que la sala cuenta con un gran mueble bañado en blanco, que ofrece diferentes baldas y cajones para guardar objetos.

De hecho, algunos de los que quedan a la vista desvelan la pasión del actor por la cultura oriental, como es el caso del pequeño busto dorado y los jarrones que lo acompañan. Y, a tan sólo un paso, se abre el exterior.

En tonos neutros

En la elección de colores, el intérprete ha decidido no arriesgar, y se decanta en cada una de las estancias por las tonalidades neutras. Una apuesta que le permite dar a cada rincón, de estilo minimalista (sólo encontramos los muebles justos), un aire elegante.

En el caso del cuarto de baño, se divide en una ducha (separada por una puerta de cristal transparente) y una bañera, de mármol, a juego con la encimera del mueble de madera. Y es que la madera es otro de los materiales estrella de la mansión, y se ha utilizado, también en las ventanas.

Una fusión entre lo vintage y lo moderno

En toda habitación, la pieza principal es la cama (baja, como es habitual en la cultura oriental) que, en este caso, dispone de un cabecero acolchado, color crema, y cojines que parecen de crochet.

Sin embargo, la fuerza decorativa llega de la mano de varios muebles vintage que se fusionan perfectamente en el cuarto. Por ejemplo, a ambos lados de la cama hay dos mesitas de noche, de madera oscura, y, más allá, una silla antigua, también de tono oscuro, a la que le acompaña un espejo con marco a juego.

En la otra pate de la estancia, se ha colocado un baúl, así como una figura que sostiene una vela.

Por último, el suelo, de madera, se ha cubierto con una alfombra de pelo blanca, que es tendencia.

Un porche muy chic y con detalles raw

Compartiendo techo con la mansión, se encuentra este porche, que el actor y su esposa han vestido de una forma muy fresca. Acompañando al entorno natural, repleto de plantas, han dejado un sofá con forma de 'L', blanco, y varios pufs del mismo color.

Para adornarlos, han dispuesto diferentes cojines con estampados, y, en el centro, como nexo de unión del rincón, hay una mesa auxiliar. Una pieza de madera raw, es decir, que apenas ha sido tratada, y, por lo tanto, le da un aire todavía más natural.

Un exterior que llama a la calma

En esta espectacular vivienda no podía faltar una piscina, cuyas escaleras, de piedra, se hunden bajo el agua. A su alrededor, desfilan diferentes hamacas, de base oscura, para así poder disfrutar relajadamente a la orilla de las aguas.

Lo que llama la atención es la pasarela, de madera, que conduce conecta esta parte exterior con otra pequeña casa.

Y para darle un ambiente más relajante, en cada esquina, se han dejado unos candelabros de madera.

Una bodega subterránea

La mansión cuenta en su parte baja con una bodega con paredes de piedra. Para guardar el vino y mantenerlo a la temperatura adecuada, se han instalado varias vitrinas de madera, que dejan las botellas a la vista.

En el centro de la estancia, una mesa ovalada, de madera, con varias sillas grisáceas alrededor, y una lámpara de cristal sobrevuela el rincón.

Una cálida sala de cine

En la vivienda también se ha creado una sala de cine, que dista mucho del estilo de las que se encuentran en este tipo de casas.

A un lado, una pantalla plana instalada en un mueble de madera, y al otro, un sofá con varios pufs aterciopelados, de color gris, y varios cojines y mantas de pelo. Protegiendo el suelo, una alfombra aterciopelada, también de color gris.

El techo, de madera, le da un aspecto cálido y acogedor, mientras que las ventanas permiten el paso de la luz natural.

Entre la vegetación

Matt Damon y su esposa, Luciana, tienen tres hijos, que han podido hacer del exterior su campo de juegos. Por ello, se ha instalado una casa de madera, toboganes y hasta una cama hinchable, entre las palmeras y frondosos árboles, que pueblan un exterior que se convierte en un auténtico refugio en la naturaleza.