Silvia Pinal: El capítulo más perturbador de “Mujer, casos de la vida real”
El programa unitario de la Primera Actriz trató temas controversiales para la época.
CIUDAD DE MÉXICO.- Sin duda, uno de los programas más longevos y exitosos de la televisión fue “Mujer, casos de la vida real”, presentado por la sonorense Silvia Pinal.
A diferencia de otros programas unitarios como “La Rosa de Guadalupe” o “Como dice el Dicho”, esa producción presentó historias verosímiles y mayormente crudas, que no siempre terminaban con un final feliz.
De 1986 hasta 2007, se presentaron distintos casos protagonizados en su mayoría por mujeres, tocando temas polémicos de la época como el aborto, la violación, las parejas del mismo sexo y más.
Sin embargo, en pleno 2021 salió a la luz lo que sería el capítulo más perturbador de las 21 temporadas del programa.
“Los colores del cielo”, (nombrado por los internautas como “El niño del globo”), se emitió en 1998 y algunos usuarios de redes sociales discutieron sobre lo fuerte que era la temática incluso para la actualidad que podría considerarse poco apropiado para la televisión.
¿DE QUÉ TRATA EL CAPÍTULO?
El episodio de 21 minutos de duración muestra la historia de una madre de bajos recursos, interpretada por Patricia Reyes Spíndola. Debido a su situación económica, se ve obligada a dejar a sus hijos menores de edad solos en casa, mientras ella lava y plancha ropa ajena para ganar dinero.
El detonador de la historia ocurre cuando dos hombres le ofrecen al hijo menor un globo rojo para que los acompañe a un lugar. Él logra evitar que se lo lleven entrando rápidamente a su casa. Sin embargo, días después, los mismos hombres regresan y lo secuestran a la salida de la escuela.
La madre y la hermana del pequeño lo buscan por todos lados, e incluso acuden a las autoridades en busca de ayuda. Pero un policía responsabiliza a la mujer del secuestro, aunque después rectifica y se arrepiente de revictimizarla así.
Los días pasan y no hay esperanzas de encontrar con vida al pequeño debido a la falta de pistas para dar con los responsables. Sin embargo, el momento más perturbador del capítulo ocurre cuando los criminales abandonan al niño en la puerta de su casa, junto al globo rojo y una caja de dinero. Cuando su madre lo encuentra, se horroriza al ver que al pequeño le sacaron los ojos.
Luego de reclamar a la policía su indiferencia en el caso, el episodio termina con Patricia Reyes Spíndola quemando el dinero que le dejaron los maleantes por los ojos de su hijo.
El capítulo retrató la gran problemática de los secuestros a menores de edad para el tráfico de órganos, y a la fecha, es considerado uno de los capítulos más fuertes del programa.
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