4 razones por las que puedes sentir frío (y cómo varía la temperatura en cada parte de tu cuerpo)
Algunas personas suelen sentir frío cualquiera sea el clima y es que hay varios factores, desde las hormonas hasta ciertos trastornos de salud, que afectan cómo sentimos la temperatura.
Casi todos nos hemos quejado de tener frío en algún momento, sobre todo a medida que llegan las temperaturas más bajas.
Pero algunas personas sienten frío cualquiera sea el clima, y hay varias razones por las que esto podría ocurrir.
La temperatura corporal normal promedio es de 36,6 ℃, pero las variaciones son comunes con diferencias de hasta 0,5 ℃.
La temperatura de una persona en reposo cambia durante un período de 24 horas, alcanzando su punto máximo alrededor de las 6 p.m. y bajando a su nivel más bajo alrededor de las 4 a.m.
La temperatura corporal promedio también ha disminuido hasta 0,03 ℃ por década de nacimiento desde que la medida se estableció por primera vez en el siglo XIX.
Las diferentes partes de nuestro cuerpo tienen diferentes temperaturas: el recto es el más cálido (37 ℃), seguido de los oídos, la orina y la boca.
La axila (35,9 ℃) es la parte más fría de nuestro cuerpo que se suele medir.
Aquí hay otros cuatro factores que afectan nuestra temperatura corporal, y pueden ser la razón por la que algunas personas siempre sienten frío.
Anatomía
Los hombres y las mujeres en realidad generan diferentes cantidades de calor para mantener el cuerpo caliente.
Los hombres tienen una tasa metabólica basal promedio en reposo (de energía quemada en reposo) más alta debido a su mayor masa muscular.
Esto significa que los hombres crean naturalmente mayores cantidades de calor para mantenerse calientes.
Del mismo modo, las capas de grasa, que están diseñadas para aislar y mantener el cuerpo caliente, se distribuyen de manera diferente en hombres y mujeres.
Las mujeres tienen una capa de grasa casi dos veces más gruesa debajo de la piel en los brazos y las piernas, por lo que el calor de los músculos subyacentes tiene más dificultades, y tarda másen llegar a los receptores de temperatura en la piel, lo que puede ser la razón de por qué algunas mujeres se quejan de sentir frío con más frecuencia.
No está claro si, una vez que están a una temperatura agradable, esta diferencia en la distribución de la grasa mantiene a las mujeres más calientes durante más tiempo.
Hormonas
Las mujeres tienen un cambio cíclico en su temperatura corporal base que está influenciado por varias hormonas involucradas en el ciclo menstrual.
Antes de la ovulación, las temperaturas tienen un promedio de 35,9 ℃, luego alcanzan un máximo de 36,7 ℃ unos días después.
Varias hormonas sexuales interactúan con el sistema que regula nuestra temperatura.
Por ejemplo, el estrógeno aumenta la vasodilatación, un ensanchamiento de los vasos sanguíneos, lo que ayuda a reducir la temperatura corporal, mientras que la progesterona tiende a provocar temperaturas corporales más cálidas.
Los estudios demuestran que la progesterona sintética, que se encuentra en los anticonceptivos orales, provoca una elevación prolongada de la temperatura corporal.
Si bien los niveles más altos de testosterona en los hombres no parecen cambiar la temperatura del cuerpo, al parecer pueden hacer que los hombres sientan menos el frío al desensibilizar uno de los receptores que detecta el frío.
Estado de salud
Algunas enfermedades y afecciones están asociadas con una tolerancia reducida o una mayor sensación de frío.
La enfermedad de Raynaud es una afección que hace que algunas áreas del cuerpo, especialmente los dedos de manos y pies (aunque también puede afectar los oídos, la nariz y los pezones) se enfríen y adormezcan en respuesta a las bajas temperaturas o al estrés.
Por lo general, no se siente frío en todo el cuerpo, pero la severidad de las áreas afectadas puede ser increíblemente dolorosa.
El trastorno es causado por el rápido estrechamiento de los vasos sanguíneos pequeños en estas áreas.
Las mujeres son más propensas a sufrir de Raynaud, al igual que las que viven en climas más fríos.
El tratamiento para la enfermedad se enfoca principalmente en evitar el frío, las situaciones que provocan estrés, los medicamentos (algunos fármacos para el resfriado) que pueden hacer que los vasos sanguíneos se estrechen, y algunos cambios en el estilo de vida.
El hipotiroidismo es otro trastorno que puede hacer que alguien sienta frío.
Afecta la glándula tiroides en el cuello, impidiendo que produzca suficientes hormonas involucradas en el mantenimiento de los niveles de energía, del cabello, piel, peso y temperatura interna.
Sin embargo, el hipotiroidismo se puede tratar con hormonas sintéticas.
Problemas de los vasos sanguíneos
La arteriosclerosis es el estrechamiento de los vasos sanguíneos debido a la acumulación de placa, el mismo material que puede causar ataques cardíacos.
Existen diferentes tipos de esta afección, pero la que más comúnmente causa una sensación de frío es la enfermedad de las arterias periféricas, en la cual se estrechan las arterias que suministran sangre a las extremidades.
La sangre mantiene los tejidos de nuestras extremidades proporcionándoles nutrientes que les permiten seguir funcionando y generando calor, razón por la cual las personas con el trastorno pueden sentir frío constantemente.
Si no se trata, los síntomas pueden progresar a isquemia de las extremidades, donde la sangre se corta por completo, lo que provoca gangrena, la necesidad de amputación y potencialmente la muerte.
Las lesiones por congelación también pueden causar una sensibilidad continua o prolongada al frío, incluso después de que la herida visible ha sanado.
La congelación generalmente comienza cuando el cuerpo, particularmente la piel expuesta, está sujeto a temperaturas bajo cero.
La respuesta del cuerpo es reducir el flujo sanguíneo a estas áreas de la piel para evitar la pérdida de calor y mantener calientes los órganos internos vitales.
El daño proviene de los cristales de hielo que se forman y desgarran los tejidos corporales.
En el peor de los casos, se pueden perder dedos y extremidades.
Cuando lo frío es caliente
En el extremo opuesto del espectro se encuentra un tipo de intoxicación alimentaria, llamada ciguatera, que hace que las cosas frías se sientan calientes (y viceversa).
Este tipo de envenenamiento por ingesta de peces de arrecife, que afecta aproximadamente a entre 50.000 y 500.000 personas cada año, surge con del consumo de ciguatoxina, que se encuentra en la especie de plancton llamada Gambierdiscus toxicus y se acumula a medida que asciende por la cadena alimentaria a través de algunos peces.
La toxina no se puede destruir cocinándola y, cuando es consumida por humanos, causa síntomas gastrointestinales y sensibilidad al frío y al calor, hipotermia e incluso la muerte.
La sensibilidad se vuelve más alarmante a medida que se invierten los sentidos, por lo que lavarse las manos con agua fría provoca una sensación de ardor en las manos.
No hay tratamiento y los síntomas pueden tardar meses o incluso años en desaparecer.
A medida que se acercan los meses fríos, es normal dirigirse al termostato o ponerse una manta.
Pero hay que tener en cuenta que si se tiene una sensación de frío prolongada o anormal debe consultarse al médico.
* Adam Taylor es profesor de la Universidad de Lancaster, Inglaterra. Este artículo apareció originalmente en The Conversation. Puedes leer la versión original en inglés aquí.
Ahora puedes recibir notificaciones de BBC Mundo. Descarga la nueva versión de nuestra app y actívalas para no perderte nuestro mejor contenido.
Sigue nuestro canal de WhatsApp
Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí