Un día como hoy, hace 103 años, asesinaron a toda la familia Romanov

RUSIA. – La familia Romanov era una dinastía rusa que llegó al trono en 1613 y que gobernó el país hasta que la Revolución de febrero de 1917 obligó al zar Nicolás II a abdicar y escapar con su esposa e hijos del palacio.

De acuerdo con la historia, Nicolás II tenía una “personalidad débil” pero llegó a gobernar rápidamente y en medio de una revolución. Su esposa era nieta de la reina Victoria de Inglaterra, la princesa Alix Von Hessen-Darmstadt, alemana de nacimiento, quien se convirtió en Alejandra cuando se unió a la iglesia ortodoxa rusa antes de su boda.

La pareja se casó en 1894 y tuvieron cuatro hijas: Olga, Tatiana, María y Anastasia. Alexei, el tan esperado heredero, llegó al mundo en 1904, y era algo delicado de salud, pues tenía hemofilia, razón por la que era tratado por Rasputín, la mano derecha de la zarina Alejandra y supuestamente “quien gobernaba desde las sombras”, y cuya presencia en el palacio causó una enorme controversia.

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La ejecución de los últimos Romanov

Luego de que las protestas y la revolución comenzaran, en octubre de 1917 los bolcheviques tomaron el poder y Lenin quedó al frente de Rusia. Posteriormente, los Romanov fueron desterrados del palacio, y encerrados durante meses con falsas esperanzas de trasladarse a otro país.

Luego, la familia Real se alojó en una casa de Ekaterimburgo, allí, el zar y la zarina pasaron sus últimos días con sus hijos.

La madrugada del 17 de julio de 1918, un comandante ordenó al médico de los Romanov que los despertara y los llevara al sótano, con el pretexto de que serían trasladados a un lugar más seguro. Sin embargo, al llegar allí, el zar, con su esposa, sus cinco hijos, tres sirvientes y el médico, recibieron la orden de quedarse sentados y esperar el transporte.

La traición

Sin embargo, unos minutos después, 12 hombres armados entraron a la habitación y les avisaron que, por orden del Comité Ejecutivo, serían ejecutados.

Posteriormente, toda la familia Romanov fue asesinada a tiros al lado de sus sirvientes y los que quedaron vivos fueron atravesados por bayonetas. Los cuerpos fueron enterrados y no se supo nada sobre su último lugar de descanso hasta años después, pues en 1976 un equipo de forenses rusos encontró los restos y para 1994, los análisis los identificaron como las osamentas de la Familia Real.