Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Estilos / Alimentación

¿Es saludable comer alimentos transgénicos?

A lo largo de la historia, la modificación genética ha sido una práctica común en la agricultura.

¿Es saludable comer alimentos transgénicos?

En el ámbito científico, los Organismos Modificados Genéticamente (OMG) han sido objeto de encendidos debates, especialmente cuando se trata de su aplicación en la agricultura y la alimentación.

Aunque la ingeniería genética ha demostrado ser útil y aceptada en áreas médicas, como la producción de insulina transgénica, la discusión se vuelve más polarizada al hablar sobre su uso en los cultivos.

A lo largo de la historia, la modificación genética ha sido una práctica común en la agricultura y ganadería, buscando obtener características beneficiosas en plantas y animales para el beneficio humano.

Sin embargo, la ingeniería genética ha llevado esta práctica a un nivel más preciso y controvertido, al permitir seleccionar genes específicos y otorgar a los cultivos características deseadas, como mayor tamaño o resistencia a plagas.

Uno de los principales argumentos en contra de los OMG es la preocupación por el flujo de genes, que implica la mezcla de cultivos transgénicos con variedades tradicionales y la posible introducción de características no deseadas en estos últimos.

Si bien se han planteado métodos para evitarlo, como las semillas terminator, que producen plantas estériles pero generaron rechazo en la opinión pública, la difusión fortuita de ADN transgénico sigue siendo un tema de preocupación.

¿Es peligroso comer transgénicos?

Sin embargo, investigaciones científicas y evaluaciones de numerosas entidades concluyen que el consumo de plantas transgénicas no conlleva un mayor riesgo para la salud que el consumo de sus equivalentes no transgénicos, indica un video del canal de YouTube En Pocas Palabras.

Aunque algunos cultivos transgénicos están diseñados para ser tóxicos para ciertos insectos, estos pesticidas personalizados no representan un peligro para los seres humanos, ya que su toxicidad es específica para las plagas objetivo.

Por otro lado, la resistencia a herbicidas es un aspecto más cuestionable de los transgénicos, ya que su uso masivo, como en el caso del glifosato, plantea dudas sobre la sostenibilidad de la agricultura moderna y sus prácticas comerciales centradas en grandes corporaciones.

A pesar de las controversias, los transgénicos tienen un potencial significativo para mejorar la agricultura y proteger el medio ambiente.

Ejemplos exitosos, como la berenjena transgénica que redujo el uso de pesticidas en Bangladés y la papaya modificada genéticamente para resistir un virus en Hawái, demuestran sus beneficios.

Los científicos trabajan en aplicaciones más amplias de los transgénicos, como mejorar la dieta mediante la producción de alimentos con mayor contenido nutricional y la creación de cultivos más resistentes al cambio climático, la sequía y las inundaciones.

También se exploran soluciones para reducir el impacto ambiental de la agricultura, como plantas capaces de extraer nitrógeno del aire, reduciendo el uso de fertilizantes y protegiendo los acuíferos.

El debate sobre los OMG va más allá de la tecnología misma y se extiende a la necesidad de transformar la agricultura hacia un modelo más sostenible.

Es fundamental considerar tanto los aspectos científicos como las prácticas comerciales y asegurar que su aplicación contribuya al bienestar de la sociedad y la protección del medio ambiente.

Sigue nuestro canal de WhatsApp

Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí

Temas relacionados