Aposentos reales del Palacio de Carlos lll en Nápoles recuperan esplendor

Tijuana BC.- La restauración de los aposentos reales del Palacio Real de Caserta, conocido como el ‘Versalles italiano’, ha concluido tras varios meses de trabajo, devolviendo su esplendor a algunas de las salas más grandes de la planta principal, informó el Museo.

La Reggia de Caserta, uno de los monumentos más visitados de Italia y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, abarca 44.000 metros cuadrados, con 1.200 habitaciones en cinco plantas y 1.790 ventanas.

Tiziana Maffei, directora del museo, expresó su satisfacción por la restauración y destacó la importancia de la conservación diaria del patrimonio, mientras el museo permanecía abierto durante los trabajos.

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Trabajan restauradores

Los restauradores trabajaron en las paredes, pinturas y suelos decorados de este edificio barroco, construido por orden de Carlos III entre 1752 y 1780, bajo la dirección del arquitecto Luigi Vanvitelli.

También se restauraron espacios más pequeños, como la Sala de Plata, tras investigaciones que revelaron el estado de conservación de los elementos decorativos.

En las Salas de Astrea y de Marte, utilizadas para encuentros diplomáticos, y la Sala del Trono, se descubrió que los estucos habían sido repintados, cubriendo el modelado, y se identificaron numerosos daños y desprendimientos en las decoraciones.

Consolidan espacios

Además de limpiar las decoraciones, se consolidaron algunos espacios con pasadores de fibra de vidrio y se mantuvo el equilibrio cromático utilizando cal, pigmentos puros y acuarelas.

La restauración de las pinturas en las bóvedas de la Sala de Astrea y la Sala del Trono, a 18 metros de altura, fue un desafío, especialmente la pintura de 5 por 10 metros en la Sala de Astrea y el fresco de Gennaro Maldarelli en el Salón del Trono, que mostraba importantes daños.

Finalmente, en la sala de audiencias públicas, de más de 40 metros de longitud, se imitó artificialmente el falso mármol en el pavimento, reproduciendo las decoraciones y vetas originales, que estaban en un estado pésimo de conservación.