Frijoles deliciosos con estos tres ingredientes

Los frijoles son un alimento importante en la dieta mexicana y una de las leguminosas más consumidas en el país. Su versatilidad en la cocina permite combinarlos con una variedad de ingredientes que realzan su sabor natural. Te compartimos una receta sobre cómo preparar unos frijoles deliciosos utilizando solo tres ingredientes: cebolla, ajo y chiles pasilla.

Ingredientes para la receta de frijoles:

• ½ kilo de frijoles (negros, pintos, o los de tu preferencia)
• 1 cebolla blanca, pelada y partida a la mitad
• 4 cabezas de ajo, peladas
• 3 chiles pasilla
• Sal al gusto
• Agua

Instrucciones:

Preparar los Frijoles:

• Enjuaga bien los frijoles bajo agua fría para eliminar cualquier suciedad o impureza.
• Coloca los frijoles en una olla grande y cúbrelos con agua, asegurándote de que haya suficiente para cubrirlos por lo menos 5 cm por encima.
• Agrega la cebolla partida a la mitad y las cabezas de ajo peladas a la olla.

Cocción:

• Lleva la olla a ebullición a fuego alto.
• Una vez que el agua esté hirviendo, reduce el fuego a medio-bajo y deja que los frijoles se cocinen lentamente durante aproximadamente 1.5 a 2 horas, o hasta que estén tiernos. Si es necesario, añade más agua para mantener los frijoles cubiertos durante la cocción.

Preparar los chiles pasilla:

• Mientras los frijoles se cocinan, tuesta los chiles pasilla en un sartén a fuego medio-bajo. Voltea los chiles con frecuencia hasta que estén fragantes y ligeramente crujientes, teniendo cuidado de no quemarlos.
• Retira los chiles del sartén y quítales el tallo y las semillas.

Agregar los Chiles a los Frijoles:

• Cuando los frijoles estén casi cocidos (unos 20 minutos antes de terminar), agrega los chiles pasilla a la olla.
• Deja que los frijoles sigan cocinándose para que los chiles liberen su sabor.

Sazonar:

• Una vez que los frijoles estén cocidos y los sabores se hayan mezclado bien, agrega sal al gusto.
• Retira la cebolla y los ajos si prefieres no servirlos.

Servir:

• Sirve los frijoles calientes como plato principal o como acompañamiento. Puedes acompañarlos con tortillas de maíz, queso fresco, o arroz.

Cómo hacer unos deliciosos frijoles refritos y cómo condimentarlos

Los frijoles refritos son otro platillo icónico en la cocina mexicana, a menudo presentes en desayunos, comidas y cenas. Esta variante consiste en cocinar los frijoles y luego freírlos para obtener una textura cremosa y un sabor único. La clave para hacer que los frijoles refritos destaquen es condimentarlos adecuadamente. Aquí te mostramos cómo hacerlo.

Ingredientes:

• 1 y 1/2 taza de frijoles cocidos de tu preferencia
• 2 cucharadas de manteca de puerco
• 1 cebolla picada
• 2 dientes de ajo picados
• 1/2 cucharada de chile chipotle
• 1 taza de caldo de pollo
• Sal al gusto
• Quesillo o queso Oaxaca

Procedimiento:

Cocer los Frijoles:

• Pon a cocer los frijoles en una olla exprés durante 1 hora y media. Luego, retira el exceso de agua.

Preparar los condimentos:

• En una sartén o cazuela de barro, añade la manteca de puerco y espera a que se caliente.
• Sofríe la cebolla y el ajo hasta que estén dorados. Luego, añade el chile chipotle.

Freír los frijoles:

• Agrega el caldo de pollo a la sartén y espera a que se consuma.
• Vierte los frijoles en la sartén y machácalos hasta obtener una consistencia cremosa.
• Cocina los frijoles a fuego bajo, moviéndolos constantemente. Si están secos, añade un poco de agua caliente.
• Agrega sal al gusto y continúa cocinando durante 15 minutos.

Servir:

• Sirve los frijoles refritos calientes y agrega el quesillo para que se gratine.

El valor nutricional y cultural de los frijoles

A pesar de ser un alimento esencial en la dieta mexicana, el consumo de frijoles ha disminuido en las últimas décadas, dijo un estudio de la UNAM del 2022. Este descenso se debió en parte al estigma de considerarlos una proteína “de pobres”, lo que ha llevado a una preferencia por alimentos procesados. Sin embargo, los frijoles son una fuente rica en proteínas, fibra, hierro y antioxidantes, y combinados con cereales como el maíz, ofrecen un valor nutricional equiparable al de la carne, pero sin colesterol.

Las leguminosas, como los frijoles, no solo son fundamentales para una dieta equilibrada, sino que también son beneficiosas para el medio ambiente. Su cultivo contribuye a la fertilidad del suelo y a la sostenibilidad agrícola, lo que las convierte en un elemento importante para la seguridad alimentaria global.