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¿Por qué los asiáticos no tienen mal olor? La ciencia lo explica

Una mutación en el gen ABCC11 explica la baja incidencia de mal olor corporal y el cerumen seco en poblaciones asiáticas orientales

¿Por qué los asiáticos no tienen mal olor? La ciencia lo explica

CIUDAD DE MÉXICO.- Con la llegada del verano y las olas de calor, el olor corporal se convierte en una preocupación para muchos. Sin embargo, un grupo de personas parece estar exento de este problema.

En las redes sociales, usuarios han señalado que muchos asiáticos orientales simplemente no huelen, y la ciencia respalda esta observación.

¿Por qué los asiáticos orientales tienen menos olor corporal?

Según los expertos, la razón detrás de este fenómeno radica en una mutación genética que afecta al gen ABCC11, relacionado con la producción de mal olor en las axilas.

Estudios compartidos por NBC News han demostrado que entre el 80% y el 95% de los asiáticos orientales poseen una disfunción en el gen ABCC11, lo que impide que sus cuerpos liberen el característico olor ácido que el resto de la población emite cuando transpira.

La Dra. Madalyn Nguyen, dermatóloga en Oregón, explica que el olor corporal “será mucho menos intenso y menos frecuente” en personas con ascendencia del este asiático, incluida ella misma. “Así que podemos pasar un poco más de tiempo sin necesidad de enmascarar nuestro olor corporal”.

Esta mutación genética se asocia principalmente con las glándulas sudoríparas apocrinas, responsables del mal olor. En quienes no tienen esta mutación, la proteína de estas glándulas ayuda a transportar lípidos desde las células hasta el sudor, donde las bacterias los descomponen, produciendo el olor característico. Sin embargo, en los asiáticos orientales con la mutación, esta proteína no funciona de la misma manera, lo que resulta en menos olor corporal y también en cerumen más seco.

Ese transportador no funciona. Y no tenemos esos mismos lípidos que pasan al cerumen y al sudor”, explicó Nguyen. También agregó que un gen ABCC11 disfuncional también está relacionado con un cerumen más seco y menos viscoso. “Por lo tanto, una menor cantidad de eso significa menos olor corporal y también se traduce en cerumen seco”.

Según un estudio publicado en el Journal of Investigative Dermatology en 2010, esta mutación es común en los asiáticos orientales, con una prevalencia particularmente alta en los coreanos. En contraste, solo entre el 1% y el 3% de las poblaciones europeas y africanas tienen esta mutación.

“No me refiero al este de Asia actual, sino al este de Asia de hace decenas de miles de años, que incluye a los habitantes del sudeste asiático”, dijo Nguyen. “Eso también se puede rastrear hasta los nativos americanos, porque hace decenas de miles de años emigraron desde el este de Asia. Muchos nativos americanos también tienen este gen de pérdida de función”.

Hasta ahora, no existe una explicación concluyente sobre la prevalencia de esta mutación entre los asiáticos orientales. No obstante, el estudio de 2010 sugirió que, debido a una tradición históricamente “más marcada de limpieza e higiene personal”, las personas con menos olor corporal podrían haber sido preferidas como parejas, lo que resultó en una población mayor con la disfunción genética.

Evolucionamos para manifestar más de ciertos rasgos dependiendo del entorno en el que nos encontremos”, dijo Nguyen. “Por eso, los escandinavos son mucho más claros que las personas que viven cerca del ecuador. Y eso se debe a que las personas que viven cerca del ecuador necesitaban crear más melanina para proteger su piel”.

La higiene personal no cambia

Si bien esta mutación parece ser una ventaja en climas cálidos, no significa que quienes la poseen puedan saltarse las duchas. Nguyen subraya que, aunque el olor corporal no es dañino para la salud, quienes se preocupan por él pueden usar lavados con peróxido de benzoilo o antitranspirantes aplicados en las axilas secas para reducir las bacterias responsables del mal olor.

“Puedes usar un lavado con peróxido de benzoilo en las axilas”, dijo. “El truco es dejarlo actuar durante un minuto o dos antes de enjuagarlo. Y eso simplemente reduce las bacterias superficiales que descomponen los lípidos en el sudor”.

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