Esta fruta mexicana es ideal para diabéticos

La tuna, fruto del nopal, es una cactácea que se cultiva ampliamente en México, siendo un ingrediente clave en la gastronomía y la salud. Existen diferentes variedades de tunas, entre las que destacan la criolla, blanca cristalina, roja y amarilla, cada una con su particular color y sabor. México es uno de los principales productores de tuna en el mundo, con una producción que satisface tanto el consumo interno como la exportación.

Propiedades nutricionales y beneficios para la salud

Este fruto tradicional mexicano es valorado no solo por su sabor dulce, sino también por sus beneficios para la salud. De acuerdo con estudios del Departamento de Ciencias de la Nutrición de la UNAM, la tuna es rica en vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes. Estos elementos hacen que la tuna sea ideal para mejorar la salud digestiva y cardiovascular, promoviendo una digestión saludable y ayudando a controlar los niveles de colesterol y azúcar en la sangre.

Un beneficio clave de la tuna es su capacidad para regular la glucosa sanguínea, lo que la convierte en un alimento ideal para personas con diabetes. Esto se debe a que la tuna contiene saponinas, compuestos que aumentan la sensibilidad a la insulina, ayudando a mantener los niveles de azúcar bajo control. Además, su alto contenido de fibra retrasa la absorción de nutrientes en el torrente sanguíneo, lo que estabiliza la glucosa después de las comidas.

Producción de tuna en Puebla

El estado de Puebla es uno de los principales productores de tunas en México. En esta región, el ciclo de cultivo del nopal se adapta a las condiciones climáticas locales, lo que permite que la cosecha de tunas abarque de abril a noviembre, con un pico de producción entre julio y septiembre. Durante esta temporada, las tunas alcanzan su madurez y están listas para ser recolectadas. La producción puede variar dependiendo de factores como la lluvia, la temperatura y la exposición al sol.

Municipios como Acatzingo, Quecholac y General Felipe Ángeles destacan por su gran superficie dedicada a este cultivo. Por ejemplo, Acatzingo tiene una superficie sembrada de 4,386 hectáreas, produciendo más de 100 mil toneladas de tuna, lo que representa un valor de producción de más de 347 millones de pesos.

Este cultivo no solo es importante por su aportación a la gastronomía poblana, sino que también tiene un papel fundamental en la economía regional. Los productores locales han logrado desarrollar productos derivados de la tuna, como jugos, mermeladas y conservas, lo que genera ingresos adicionales y promueve la sostenibilidad agrícola en la región.

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Investigación y sostenibilidad

La investigación en torno a la producción de tuna en Puebla ha permitido mejorar las técnicas de cultivo y promover la sostenibilidad. Universidades e instituciones locales colaboran para optimizar los procesos de producción, garantizando que la agricultura del nopal sea eficiente y respetuosa con el medio ambiente.

Otros beneficios de la tuna

Además de ser un aliado para las personas con diabetes, la tuna tiene otras propiedades medicinales. Históricamente, se ha utilizado como antiinflamatorio y laxante natural. También es rica en fibra insoluble, lo que genera sensación de saciedad, ayudando en el control del apetito y siendo beneficiosa para quienes buscan perder peso o combatir la obesidad.

Otro beneficio de la tuna es su capacidad para reducir el colesterol “malo” (LDL). La fibra, junto con los aminoácidos y la niacina presentes en la fruta, evita que el exceso de colesterol sea absorbido y acumulado en las venas y arterias, previniendo problemas cardiovasculares.