¿Qué es la violencia económica? Estos son 5 ejemplos

México.- La violencia económica es una forma de abuso que, aunque no deja marcas físicas evidentes, puede tener un impacto profundo y duradero en las víctimas. Este tipo de violencia es particularmente insidioso porque afecta la autonomía y la libertad de quienes la padecen, haciendos dependientes económicamente del abusador.

A diferencia de la violencia física, la violencia económica puede ser más difícil de detectar, pero sus efectos son iguales de devastadores, razón por la cual es fundamental hablar de ella para que pueda reconocerse, prevenirse y, en última instancia, erradicar.

Según la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) , la violencia económica o financiera “es un tipo de abuso que ocurre cuando una persona controla o manipula los recursos financieros de otra persona para mantener poder y control sobre la misma”.

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Este control financiero puede presentarse de diversas formas, como restringir el acceso de la víctima a productos financieros, impedir que pueda generar sus propios ingresos o limitar su capacidad para hacer uso de su dinero.

Si bien este tipo de abuso ocurre con mayor frecuencia en relaciones de pareja, donde un hombre puede controlar los recursos de una mujer, también puede darse en otras dinámicas familiares o incluso en el entorno laboral.

Además, la violencia económica puede facilitar la aparición de otras formas de violencia, como la psicológica o física, ya que el control financiero genera una dependencia que dificulta la salida de la víctima de la situación de abuso.

La prevalencia de la violencia económica en México

Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) revelan que dos de cada diez mujeres de 15 años o más en México han reportado vivir violencia económica en algún momento de su relación. De hecho, la violencia económica ocupa el segundo lugar en prevalencia entre las mujeres, superada únicamente por la violencia psicológica. Estos datos son alarmantes y subrayan la necesidad de abordar este tipo de violencia con urgencia.

Cinco formas comunes de violencia económica

Para combatir la violencia económica, es necesario primero identificar sus manifestaciones. Estas son las cinco formas más comunes en las que se presenta:

• Control de ingresos : El abusador impide que la víctima trabaje o genere ingresos propios. Si la víctima tiene ingresos, el abusador puede confiscar ese dinero o gestionarlo a su antojo.
• Control de gastos : La víctima está obligada a pedir permiso para gastar su propio dinero, y el abusador supervisa o limita el uso de los recursos de la víctima.
• Generación de deudas : El abusador contrae deudas a nombre de la víctima, a menudo sin su consentimiento, lo que la deja con responsabilidades financieras no deseadas.
• Manipulación de bienes : Los bienes de la víctima son utilizados sin su autorización o en su nombre, como propiedades, cuentas bancarias o inversiones.
• Restricción del acceso a recursos financieros : El abusador limita el acceso de la víctima a productos financieros como tarjetas de crédito, seguros o cuentas bancarias, impidiendo su autonomía financiera.

Prevención de la violencia económica

La educación financiera es una herramienta crucial para prevenir la violencia económica, ya que proporciona a las personas los conocimientos y habilidades necesarios para gestionar sus finanzas de manera independiente. Con una buena educación financiera, las personas pueden protegerse contra posibles abusos y manejar de manera efectiva sus recursos económicos.

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Entre las principales ventajas de contar con una sólida educación financiera se encuentran:

• Autonomía económica : Saber gestionar las finanzas personales reduce la dependencia de otros, lo que disminuye la posibilidad de sufrir abusos económicos.
• Conocimiento de derechos y recursos : La alfabetización financiera permite a las personas conocer sus derechos en cuanto a productos y servicios financieros, así como los procedimientos para buscar ayuda en caso de ser víctimas de abuso.
• Capacidad de planificación : Una adecuada educación financiera enseña a planificar el manejo del dinero con objetivos a corto, mediano y largo plazo, lo que protege contra el mal manejo de los recursos propios.
• Conciencia y prevención : Con educación financiera se adquiere la capacidad de identificar señales de abuso económico y tomar medidas para prevenirlo o detenerlo.