"Después de leer esto no te quedarán ganas de comer azúcar"

En un revelador video presentado por el Dr. Eric Berg, se expone el impacto perjudicial del consumo de azúcar en el funcionamiento de las mitocondrias y su relación con diversas enfermedades metabólicas.

El doctor destaca la importancia de conocer los efectos del azúcar en el organismo para poder tomar decisiones conscientes sobre su consumo.

El azúcar y los alimentos que se convierten rápidamente en azúcar, como los carbohidratos refinados, son mencionados como los principales responsables de la disfunción mitocondrial, un factor clave en enfermedades como las cardiovasculares, el cáncer, el Alzheimer, las enfermedades renales y hepáticas, entre otras”, indicó.

El azúcar de remolacha, ampliamente utilizado en Estados Unidos, además de ser refinado, suele contener trazas de glifosato, un herbicida que también puede afectar negativamente las mitocondrias. Asimismo, el consumo excesivo de fructosa, presente en bebidas y jarabes, sobrecarga el hígado y las mitocondrias, ya que solo este órgano puede metabolizarla, afirma.

Berg indica que el deterioro de las mitocondrias conlleva una disminución en la producción de energía y un aumento en la generación de especies reactivas de oxígeno, altamente perjudiciales para las células. Esto se traduce en inflamación, daño celular y mayor susceptibilidad a enfermedades como la diabetes y el cáncer.

La Azúcar causa deficiencia de vitamina B1

El consumo excesivo de azúcar también inhibe la mitofagia, el proceso de reciclaje de mitocondrias dañadas, lo que agrava aún más los problemas celulares. Además, se ha observado que el azúcar causa deficiencias de tiamina (vitamina B1) y zinc, nutrientes esenciales para el correcto funcionamiento de las mitocondrias y la salud en general.

El Dr. Berg señala que adoptar una dieta baja en carbohidratos, como la dieta cetogénica, y eliminar el azúcar y los carbohidratos refinados puede tener un impacto inmediato en la mejora de las mitocondrias. El ejercicio, especialmente el entrenamiento intervalado de alta intensidad, también fortalece estas estructuras celulares.

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Además, se mencionan otras estrategias para mejorar las mitocondrias, como la terapia de frío, la exposición al sol, el ayuno intermitente y el consumo de ciertos alimentos y nutrientes, como el resveratrol, la quercetina, los fitonutrientes del té verde y el ajo.

El estudio de las mitocondrias revela su origen como resultado de la simbiosis entre bacterias y células, y su papel fundamental en la producción de energía. Sin embargo, el consumo excesivo de azúcar daña estas estructuras y promueve el desarrollo de enfermedades metabólicas.

El mensaje del Dr. Eric Berg es claro: tomar conciencia de los efectos negativos del azúcar en las mitocondrias y en la salud en general puede ayudarnos a tomar decisiones informadas y adoptar hábitos más saludables, como una dieta equilibrada y la práctica regular de ejercicio. Cuidar nuestras mitocondrias puede ser la clave para una vida más plena y saludable.