Hábitos que provocan malestar estomacal y exageración
Porciones generosas
: Limitar la cantidad de alimentos es una de las medidas más importantes para bajar de peso. Échate una porción pequeña. Si te quedas con hambre siempre puedes repetir con mesura.
Ignorar el desayuno
: No desayunar parece una buena manera de evitar las calorías, pero al acercarse el almuerzo, estarás propenso a comer en exceso.
Comer y mirar la televisión
: Aquellos que cultivan el hábito de comer frente al televisor o la computadora terminan comiendo mucho más, simplemente por no prestar atención a la cantidad de alimentos que consumen.
Hambre vs. Sed
: Muchas personas confunden las sensaciones de hambre y sed. Si la sensación de hambre permanece tras la comida, prueba beber líquidos. Es difícil distinguir cuándo tenemos hambre o sed, así que intenta tomar agua y esperar de entre 20 y 30 minutos para asegurarte de que realmente tienes hambre.
Salud en pareja
: Si tu pareja no se muestra muy preocupado por la cantidad de alimentos que consume, eso podría afectar el desempeño de tu dieta. Es realmente difícil mantener la línea cuando ambos comen juntos. Un buen consejo es comer ingredientes similares, pero tratar de hacer actividades distintas.
Platos grandes
: ¿Has notado que los platos grandes hacen comer más? Cuando hay mucho espacio blanco en el plato, las porciones parecen más pequeñas de lo que realmente son. En lugar de llenarlas con más alimentos, come en platos más pequeños.
Culpa
: La culpa es la base de todas las dietas restrictivas y la esencia de todas las recaídas. Hay que repensar la forma, el tiempo y la cantidad que comemos. Comer es una experiencia sensorial en la que no sólo interviene el gusto, sino la vista, el tacto y el olfato. Llenar la vista con lo que vamos a comer genera sensación de saciedad mayor que si sólo satisfacemos el gusto.
Snacks
: Desafortunadamente, muchas personas piensan que cualquier tipo de aperitivo es dañino para la dieta. De hecho, es importante darse cuenta de que ingerir pequeñas porciones de alimentos a lo largo del día evita sentir hambre y frena la exageración en las comidas principales.
Comer después del gimnasio
: No uses un entrenamiento duro como excusa para satisfacer todos tus deseos. A menos que sea hora de hacer una de las comidas del día, el promedio de calorías recomendado para consumir después del entrenamiento es de 150. Plátano, tuna, pavo, leche y huevo son alimentos indicados para ayudar la recuperación muscular.
Controla tus emociones
: Comer como consuelo emocional es una práctica cultivada a menudo, pero ese hábito podría ser un riesgo para tu salud. Afrontar las emociones con alimentos, especialmente aquellos ricos en azúcar, aumenta el riesgo de desarrollar enfermedades, como la diabetes. ¡La comida no solucionará tus problemas!