ESTADOS UNIDOS.- En el remoto pueblo de Stanberry, Missouri, la década de los noventa presenció el surgimiento de una historia que aún hoy deja perplejos a sus habitantes. Mike Marcum, un joven de apenas 21 años, se aventuró en el terreno de la ciencia con un objetivo audaz: construir una máquina del tiempo.

Marcum, dotado de una mente brillante en el campo de la electricidad, inició su proyecto en el patio trasero de su hogar. Utilizando componentes electrónicos y un láser de disco compacto modificado, dio vida a lo que llamó el “Jacobs Ladder”, un dispositivo que, según informes, generaba un intrigante arco eléctrico con apariencia de vórtice.

La leyenda se cimentó cuando, en medio de sus experimentos, Marcum lanzó un tornillo de chapa a través de este vórtice, presenciando cómo el objeto desaparecía momentáneamente para luego reaparecer a corta distancia. Este fenómeno avivó las especulaciones sobre la posibilidad de haber descubierto una forma primitiva de viaje en el tiempo.

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Sin embargo, la ambición del joven científico lo llevó por caminos ilegales. En su búsqueda de mayor potencia para su máquina, se vio involucrado en el robo de seis transformadores de gran tamaño, causando un apagón masivo en su vecindario y conduciendo a su arresto el 29 de enero de 1995.

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¿Logró perfeccionar su máquina del tiempo?

Tras su liberación, Marcum hizo una aparición en el programa radial “Coast to Coast AM” con Art Bell, donde compartió su historia y aseguró su intención de continuar sus experimentos de manera legal y financiada adecuadamente.

Pero aquí es donde el relato toma un giro aún más enigmático. Después de su participación en el programa radial, Mike Marcum desapareció sin dejar rastro. Su destino sigue siendo desconocido, alimentando teorías que van desde la posibilidad de haber sido silenciado por fuerzas desconocidas hasta la especulación de que logró su objetivo y viajó a través del tiempo. Otra teoría popular sugiere que simplemente huyó con el dinero donado para sus experimentos.

El misterio de Mike Marcum, un joven científico que desafió los límites del conocimiento humano, continúa intrigando a esta pequeña comunidad y más allá, dejando abierta la puerta a la especulación y a la imaginación sobre su verdadero destino.