Top 10 datos raros e interesantes sobre los animales

MÉXICO.- Los animales son fascinantes y, aunque parezca que ya sabemos casi todo sobre ellos, realmente todavía tenemos mucho que aprender. Descubre 10 curiosidades animales.

Número 10: Cuando un perico habla, es muy común pensar que está repitiendo cosas sin pensarlo. Pero en los últimos años, se ha demostrado que los pericos hacen mucho más que repetir todo sin razón.

De hecho, son capaces de tener pensamientos lógicos complejos y pueden resolver procesos lingüísticos al mismo nivel que un niño de 5 años.

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Algunos pericos han demostrado entender conceptos como igual y diferente, grande o chico, y hasta cantidades y números, incluyendo el cero.

Número 9: Todos sabemos que las jirafas tienen un cuello exageradamente largo que usan para alcanzar las hojas de los árboles. Aunque los beneficios son obvios, tener un cuello tan largo tiene varias dificultades.

Su corazón tiene que latir el doble de fuerte que el de una vaca para que la sangre pueda llegar a su cerebro.

A pesar de parecer diferente, el cuello de una jirafa tiene las mismas partes que otros animales, solo que mucho más alargadas.

Número 8: A los tiburones no les gusta comer humanos; ellos prefieren peces o invertebrados como los calamares. Normalmente, cuando un tiburón ataca a un humano, es debido a la mala visibilidad en el agua.

En la mayoría de los ataques, los tiburones solo muerden a las personas y no las matan para comerlas.

En promedio, ocurren alrededor de 30 ataques de tiburón al año, de los cuales tan solo cinco son fatales. Es más probable morir aplastado por una máquina expendedora que por un tiburón.

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Número 7: Es un error común creer que los animales son egoístas y que solo les importa su propia supervivencia. Existen miles de casos en los que los animales se ayudan unos a otros para poder sobrevivir en conjunto.

Un buen ejemplo es el de los pollitos, que hacen un sonido muy particular cuando están comiendo, invitando a otros pollitos a unirse. La clave de la selección natural no es la supervivencia del mejor individuo, sino del mejor material genético.

Número 6: A diferencia de los humanos, que tenemos globos oculares, los búhos tienen tubos oculares. Esto significa que no pueden mover los ojos para mirar en diferentes direcciones.

Sin embargo, su cuello puede girar hasta 270 grados. Tal vez esa sea la razón por la que siempre tienen esa expresión de horror en su cara, pero con esta habilidad, ¿quién necesita mover los ojos?

Número 5: Durante el invierno, es raro que los castores salgan de sus madrigueras. Ellos pasan meses hibernando en la oscuridad, viviendo de la comida que tienen guardada o de la grasa almacenada en sus cuerpos.

Debido a esto, los castores no saben cuándo es de día o de noche, y sus ciclos de sueño cambian. En lugar de tener un ciclo diario de 24 horas, el de los castores dura 29 horas.

Número 4: Las cabras monteses son animales realmente fascinantes. Su más impresionante habilidad es la de escalar paredes casi verticales, manteniendo un equilibrio impresionante.

Además, pueden saltar hasta 2 metros de altura, lo que les ayuda a escapar de depredadores como lobos, osos, zorros y linces. Ni siquiera el mejor escalador del mundo puede igualar lo que estas cabras hacen todos los días.

Número 3: Dentro del estómago de un cocodrilo puedes encontrar todo tipo de cosas, desde tortugas, pescados, aves y piedras. Durante mucho tiempo, no se supo por qué los cocodrilos tragaban piedras.

Se pensó que era por accidente, pero se descubrió que lo hacen a propósito. Ellos tragan rocas para descender a lo más profundo del río, ya sea para acechar a su presa o para descansar.

Número 2: Para los gecos y otras lagartijas, caminar en paredes y techos es muy fácil gracias a que sus patas están cubiertas de miles de pequeños filamentos. Estos filamentos, más delgados que un cabello humano, pueden soportar una carga de 20 kg.

Una compañía llamada Gel ha creado una réplica sintética de estos filamentos, que podría permitirnos trepar como Spider-Man en el futuro.

Número 1: El pez arquero es famoso por sus certeros disparos de agua para conseguir alimento. Además de escupir con precisión, los peces arqueros tienen otra habilidad impresionante.

Un estudio mostró que los peces arqueros pueden reconocer rostros humanos, acertando el 86% de las veces.

Además de las sorprendentes habilidades y comportamientos que poseen, estos datos resaltan la complejidad y adaptabilidad de los animales en su entorno natural.

A través de la observación y el estudio, hemos aprendido que los animales son mucho más inteligentes y cooperativos de lo que alguna vez imaginamos.

Estas curiosidades no solo nos asombran, sino que también nos invitan a reflexionar sobre nuestra relación con el mundo natural y la importancia de seguir investigando para comprender mejor a las especies con las que compartimos el planeta.

La naturaleza nos demuestra constantemente que la diversidad y la adaptabilidad son clave para la supervivencia y el éxito evolutivo.