Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Lo curioso / miedo

Así reacciona el cuerpo cuando sentimos miedo: Un vistazo científico

El miedo se origina en la amígdala, una región del cerebro en el sistema límbico encargada de regular nuestras emociones.

Así reacciona el cuerpo cuando sentimos miedo: Un vistazo científico

Cuando sentimos miedo, nuestro cuerpo experimenta una serie de reacciones naturales que forman parte de un complejo mecanismo de supervivencia. Esta respuesta se activa ante situaciones que percibimos como amenazantes y es crucial para nuestra adaptación y supervivencia, según explica un documento del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Las emociones y su papel en la supervivencia

Las emociones, incluidas las más comunes como la ira, sorpresa, alegría, y tristeza, son esenciales para expresar y manejar nuestras experiencias diarias. El miedo, en particular, actúa como una alarma ante el peligro, preparando al cuerpo para huir, evitar o enfrentar la amenaza. Es una emoción básica que compartimos con muchos animales y nos ayuda a mantenernos seguros y equilibrados entre lo racional e irracional.

Reacciones corporales ante el miedo

Cuando sentimos miedo, varias reacciones físicas y psicológicas se ponen en marcha. La UNAM destaca las siguientes:

  • Palpitaciones aceleradas: El corazón late más rápido para bombear más sangre a los músculos.
  • Sudoración: El cuerpo suda más para regular la temperatura y prepararse para una posible acción física.
  • Respiración agitada: La respiración se vuelve más rápida y superficial, aumentando la cantidad de oxígeno en la sangre.
  • Contracción muscular y temblor: Los músculos se tensan y pueden temblar debido a la alta tensión.
  • Expresiones faciales: Pueden aparecer expresiones de miedo, como la palidez, debido a la redistribución del flujo sanguíneo.

Mecanismos cerebrales del miedo

El miedo se origina en la amígdala, una región del cerebro en el sistema límbico encargada de regular nuestras emociones. Otras áreas cerebrales involucradas incluyen:

  • Tálamo: Envía datos sensoriales entrantes (ojos, oídos, boca, piel) a otras partes del cerebro.
  • Córtex sensorial: Interpreta los datos sensoriales.
  • Hipocampo: Almacena y recupera recuerdos conscientes y contextualiza la situación.
  • Hipotálamo: Activa la respuesta de lucha o huida.

La reacción de lucha o huida

Esta respuesta es un mecanismo automático de supervivencia que prepara al organismo para enfrentar o escapar de la amenaza. Incluye:

  • Pensamientos acelerados: La mente se enfoca en la amenaza y cómo manejarla.
  • Visión más aguda: Los sentidos se agudizan para percibir mejor el entorno.
  • Desviación de energía: La energía se redirige de la digestión hacia los músculos, provocando tensiones y una posible relajación de los músculos de la vejiga.
  • Resequedad en la boca: Debido a la disminución de la actividad digestiva.

Te puede interesar: La ciencia detrás del color del cabello: ¿Por qué es rubio, castaño o negro?

Entender cómo reacciona nuestro cuerpo al miedo nos permite reconocer y manejar mejor esta emoción. Aunque puede ser incómodo, el miedo es una herramienta vital para nuestra supervivencia, ayudándonos a estar alerta y preparados ante posibles peligros. La clave está en mantener el equilibrio entre lo racional y lo irracional, utilizando esta emoción a nuestro favor.

Con información de Natgeo.

Temas relacionados