¿Quién inventó el aire acondicionado?

Aunque no se considere un invento crucial para la humanidad, la contribución de Willis Carrier a la comodidad durante las olas de calor es innegable. Es posible que mucha gente no haya oído hablar de Carrier, pero todos hemos disfrutado del resultado de su invento. Cuando llega el verano y el interior de nuestra casa alcanza temperaturas insoportables, pulsamos el botón del mando del aire acondicionado, un dispositivo tan cotidiano e imprescindible como el televisor.

Un ingeniero curioso

Willis Carrier nació en la calurosa ciudad de Angola, Nueva York, donde la temperatura media en verano no baja de los 27 grados centígrados. Desde joven, mostró una gran curiosidad por montar y desmontar aparatos de todo tipo. Su talento lo llevó a obtener una beca para estudiar Ingeniería Eléctrica en la Universidad de Cornell, donde se graduó en 1901. Comenzó a trabajar en Buffalo Forge, una empresa de ventiladores y bombas de calor, y ascendió rápidamente gracias a sus habilidades.

En 1902, la imprenta Sackett & Wilhelms Lithographing & Publishing Company pidió a Buffalo Forge mejorar la calidad del aire en su planta. Willis Carrier, inspirado por una fría noche en la estación de tren, ideó un sistema para “secar” el aire filtrándolo a través de un rocío de agua, condensando la humedad. Ese mismo año, Carrier instaló el primer aparato de aire acondicionado tipo spray del mundo, capaz de controlar la humedad ambiental. Aunque el término “aire acondicionado” fue acuñado en 1906 por Stuart Warren Cramer, Carrier patentó su invento ese mismo año.

El primer aire acondicionado de Carrier era una máquina enorme, con un ventilador industrial, conductos, calentadores, tuberías de vapor perforadas y controles de temperatura. A pesar de su tamaño, cumplía perfectamente su función. En 1906, Carrier recibió la patente para su “aparato para tratar el aire”, diseñado para humidificar o deshumidificar el aire. En 1915, tras la Primera Guerra Mundial y la crisis económica, Carrier fundó la Carrier Engineering Corporation, donde continuó mejorando su invento.

En 1926, Carrier presentó el primer acondicionador de aire doméstico, permitiendo que no solo grandes empresas, sino también hogares y pequeñas tiendas pudieran disfrutar de temperaturas frescas. Aunque la Gran Depresión y la Segunda Guerra Mundial ralentizaron su expansión, el boom económico de la posguerra en los años 50 impulsó el uso del aire acondicionado en todo el mundo.

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Willis Carrier falleció el 7 de octubre de 1950, pero su legado perdura. Su invento lo llevó al Salón de la Fama de los Inventores, y en 1998, la revista Time lo nombró uno de los 100 personajes más influyentes del siglo XX. La empresa Carrier, con 51 fábricas y 39 centros de investigación en todo el mundo, sigue adaptándose a las necesidades del mercado y del planeta, comprometida con la conservación del medioambiente y la salud de las personas.

Con información de Natgeo.