Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Lo curioso / Río Sena

La fascinante historia de Secuana, la antigua diosa que bautizó el río Sena

Secuana, una deidad sanadora de origen celta, recibió culto tras la conquista romana de la Galia en el siglo I a.C.

La fascinante historia de Secuana, la antigua diosa que bautizó el río Sena

La ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de París 2024 se llevará a cabo en el icónico río Sena. Esta legendaria vía fluvial no solo es famosa por sus impresionantes vistas y monumentos históricos como Notre Dame y la Torre Eiffel, sino también por su profunda conexión con la antigua diosa galo-romana, Secuana.

El legado de Secuana

Secuana, una deidad sanadora de origen celta, recibió culto tras la conquista romana de la Galia en el siglo I a.C. En el siglo XIX, arqueólogos descubrieron un santuario en el nacimiento del Sena, en Borgoña, repleto de exvotos: esculturas de brazos, pelvis y órganos internos. Estas ofrendas, hechas por peregrinos, representaban heridas o enfermedades que necesitaban curación. Franck Abert, conservador del Museo Arqueológico de Dijon, destaca la singularidad de los exvotos de madera, que datan del año 40 a.C. y se han conservado en condiciones húmedas durante más de dos milenios.

Entre los hallazgos más curiosos se encuentran exvotos de piedra con manos en forma de estribo que sostienen un fruto redondo, y estatuillas de niños con cachorros, reflejando posibles procesiones ceremoniales que culminaban con sacrificios animales, una práctica común en la antigua Roma. Además, se hallaron inscripciones dedicadas a Secuana, como una tinaja rebosante de monedas, exvotos y anillos de oro, ofrecida por un creyente llamado Rufo.

Secuana pudo haber tenido una influencia más allá de las inmediaciones del Sena debido a la importancia económica del río. La palabra “Sena” evolucionó del nombre de la diosa, un testimonio de su origen galo. Los arqueólogos creen que los celtas llevaban ofrendas a la diosa del río para pedir curación o agradecer deseos cumplidos, una práctica que evolucionó en la época galo-romana con complejos de templos de piedra.

Los romanos, al conquistar nuevos territorios, adoptaban deidades locales y las integraban en su panteón. Secuana representa una fusión de culturas. Abert explica que los galos no hacían estatuas de sus dioses como los romanos, y fue con la romanización que aparecieron las primeras representaciones de dioses galos. La única personificación de Secuana se conserva en una estatua de bronce del siglo I en el Museo Arqueológico de Dijon. La diosa, coronada y vestida con una túnica, está a horcajadas sobre una barca con proa en forma de cabeza de pato o cisne, evocando a un ave acuática, símbolo protector de los niños y la familia.

Te puede interesar: Así puedes ser un viajero consciente y evitar el sobreturismo

El artista y cineasta Yan Tomaszewski se inspiró en los antiguos rituales de Secuana para su proyecto de exvotos contemporáneos: esculturas envueltas en algodón con carbón activado, sumergidas en el río para purificar el agua. Este proyecto refleja el colosal esfuerzo de limpieza del Sena para hacerlo apto para el baño con motivo de los Juegos Olímpicos, un tributo moderno a la antigua diosa y su conexión con el río.

Con información de Natgeo.

Sigue nuestro canal de WhatsApp

Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí

Temas relacionados