Récord de calor: 21 de julio, el día más caluroso desde la era preindustrial

El pasado 21 de julio se convirtió en el día más caluroso jamás registrado en el mundo. Según los datos preliminares del Servicio de Cambio Climático Copernicus (C3S), la temperatura media global alcanzó los 17.09°C, superando el récord anterior de 17.08°C registrado el 6 de julio de 2023.

Los científicos han observado un aumento inesperado en las temperaturas globales durante la última década. Carlo Buontempo, director del C3S, destacó la gran diferencia entre las temperaturas de los últimos 13 meses y las de años anteriores, subrayando que estamos en un territorio climático desconocido.

Durante el verano pasado, las temperaturas en el hemisferio norte fueron 2.07°C más altas que el promedio de la era preindustrial. Desde el séptimo mes del año pasado, se han registrado 57 días con temperaturas superiores a los récords anteriores.

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El informe del C3S sugiere que este fenómeno está estrechamente relacionado con el calentamiento de la Antártida y la reducción del hielo marino, lo que provoca temperaturas superiores al promedio en el océano Austral. La Organización Meteorológica Mundial (OMM) estima que más del 90% de los mares experimentaron olas de calor en algún momento del año pasado, afectando especialmente a los glaciares, que sufrieron la mayor pérdida de hielo desde 1950.

¿Qué nos espera entre 2024 y 2028?

La OMM ha señalado que existe un 86% de probabilidades de que se establezca un nuevo récord de calor entre 2024 y 2028. Este organismo prevé que la superficie terrestre se calentará entre 1.1 y 1.9°C respecto a la era preindustrial. Sin embargo, el pronóstico final dependerá en gran medida del comportamiento del fenómeno de La Niña en los próximos meses.

El Acuerdo de París y los límites del calentamiento

A pesar de las medidas tomadas hasta el momento, los expertos consideran que son insuficientes para frenar el avance del calentamiento global. El cumplimiento de los límites del Acuerdo de París, que busca mantener el aumento de la temperatura mundial por debajo de 1.5°C, está en duda. Desde que se adoptó el tratado, las probabilidades de superar este margen han aumentado significativamente.

La ONU advierte que los actuales niveles de calentamiento global ya están produciendo efectos devastadores, como olas de calor más intensas, precipitaciones y sequías extremas, y la aceleración del derretimiento de las capas de hielo y glaciares. Estos fenómenos generan una preocupación creciente sobre el futuro de nuestro planeta.