¿Por qué debería importarte una guerra entre parásitos dentro de un caracol?

Haplorchis pumilio no es un nombre familiar, pero los científicos han descubierto recientemente una estrategia que estos parásitos microscópicos, algo nunca antes visto. Cuando estos gusanos planos trematodos invaden a un huésped, típicamente el caracol trompeta malayo, comienzan a construir una colonia de clones, cada uno genéticamente idéntico a los demás.

Desde el momento en que los trematodos invaden el huésped, inician un proceso de clonación masiva. Con el tiempo, inundan la cavidad corporal del caracol con sus copias, mientras devoran las gónadas del caracol, castrándolo en el proceso. La competencia de otros parásitos dentro del huésped puede ser feroz, ya que se han encontrado hasta 38 tipos diferentes de trematodos habitando estos moluscos de agua dulce.

Según un nuevo estudio publicado en la revista PNAS, estos gusanos planos pueden crear un ejército de cuerpos excepcionalmente pequeños, bocas enormes y un único propósito: localizar otras especies de gusanos planos, adherirse a sus costados y succionar sus entrañas. Este tipo especial de gusano guerrero no tiene material reproductivo y no puede crear copias de sí mismo.

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¿Por qué debería importarte una guerra entre parásitos dentro de un caracol?

La respuesta es que las vidas humanas pueden depender de quién gane esa batalla. Los trematodos no pueden completar su ciclo de vida sin pasar por múltiples organismos más grandes, conocidos como “huéspedes intermedios”. Para H. pumilio, el viaje comienza con un caracol, progresa a peces y finalmente infecta a aves y mamíferos.

Aunque los humanos no son el huésped preferido de este gusano plano, aún pueden sufrir las consecuencias. La infección por H. pumilio puede causar dolor abdominal, diarrea, pérdida de peso y otros problemas de salud. Las personas se infectan con estos gusanos planos al comer plantas acuáticas, como el berro, o ingerir carne de animales infectados, como moluscos, peces o incluso mamíferos que han consumido esos elementos, según la Organización Mundial de la Salud.

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El descubrimiento de esta casta de soldados en los gusanos planos es un avance fascinante en la biología de los parásitos.