¿Qué destruye el amor? Un abogado de divorcios responde

CIUDAD DE MÉXICO.- En un video para Soft White Underbelly en Youtube James Sexton, abogado especializado en divorcios, comparte su visión sobre el amor y el matrimonio, revelando sus observaciones tras años de experiencia en el campo. Sexton relata cómo, después de su propio divorcio, se enfrentó a un periodo de intensa actividad amorosa que pronto se volvió insatisfactoria. Según él, la búsqueda de nuevas parejas se sintió como una tarea más que como un placer, comparando su experiencia con el sentimiento de haber comido en exceso. Esta reflexión lo llevó a cuestionar la naturaleza y la autenticidad del deseo y el compromiso en las relaciones a medida que uno envejece.

Sexton también aborda un caso particularmente triste en su carrera: el divorcio de un hombre de 92 años que dejó a su esposa de más de 60 años por una mujer más joven. El abogado expresa su desilusión al ver que incluso en una etapa avanzada de la vida, el hombre seguía siendo guiado por impulsos que, a su juicio, deberían haber desaparecido con el tiempo. Este episodio le hizo reflexionar sobre la permanencia del deseo físico y su impacto en las decisiones de vida, incluso en la vejez.

El Valor de la Atracción y las Expectativas Sociales

Sexton analiza cómo la atracción física y el estatus económico influyen en el valor que se otorga a las relaciones. Destaca que la atracción de las mujeres sigue siendo una de las “commodities” más valoradas, y menciona casos en los que mujeres que se separan después de recibir grandes sumas de dinero de sus esposos, obtenidas mediante éxitos financieros, han generado debates sobre la equidad en el matrimonio. Según él, este fenómeno resalta cómo las expectativas sociales y las realidades económicas pueden jugar un papel crucial en la dinámica de las relaciones y los divorcios.

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El abogado también cuestiona la percepción común de que el matrimonio es un contrato puramente emocional o romántico. Según Sexton, el matrimonio es en realidad un acuerdo legal y contractual que, en muchos casos, resulta ser un “juego de azar” en el que los riesgos pueden ser desproporcionados en relación con los beneficios. La alta tasa de divorcios, que él estima en un 76% si se incluyen los matrimonios que se mantienen por razones como los hijos o el miedo a dividir los bienes, subraya su punto de vista sobre la naturaleza arriesgada del matrimonio.

Reflexiones sobre el Matrimonio y la Expectativa de Vida

Sexton también ofrece una perspectiva histórica sobre el matrimonio, mencionando que este se originó alrededor del 2000 a.C. cuando la esperanza de vida era mucho menor. En ese contexto, el matrimonio servía principalmente para asegurar la propiedad y la herencia. Según él, el matrimonio moderno ha evolucionado desde su propósito original y ahora se enfrenta a desafíos únicos debido al aumento en la esperanza de vida y los cambios en las expectativas sociales.

El abogado destaca que el matrimonio, en esencia, se basa en un contrato que terminará en la muerte o en el divorcio. Esta visión pragmática sugiere que, a pesar de las intenciones y el amor al inicio de una relación, las probabilidades de que una relación termine en una separación son significativas. La dificultad para mantener una relación feliz y duradera se ve acentuada por la falta de preparación y diálogo sincero sobre las expectativas y responsabilidades a largo plazo.

La Realidad de los Divorcios y el Papel de los Acuerdos Prenupciales

Sexton también comenta sobre la importancia de los acuerdos prenupciales, argumentando que, a pesar de que suelen ser considerados incómodos o incómodos, pueden ahorrar enormes sumas de dinero y evitar conflictos futuros. Según él, un prenupcial bien redactado puede ser una herramienta valiosa para definir claramente las expectativas y los derechos en caso de una separación, evitando así la necesidad de litigar por la división de bienes en el futuro.

El abogado enfatiza que la falta de un acuerdo claro sobre los activos y las deudas puede llevar a disputas prolongadas y costosas. Los acuerdos prenupciales ayudan a establecer reglas claras desde el principio, lo que puede facilitar una separación más ordenada y menos conflictiva si llega el momento. A pesar de su importancia, muchos evitan estos acuerdos por considerarlos incómodos, lo que puede llevar a complicaciones innecesarias en el futuro.

La Realidad de la Vida Conyugal y la Expectativa de Amor

Finalmente, Sexton reflexiona sobre la realidad del amor y el matrimonio en la sociedad moderna. A pesar de su experiencia profesional, reconoce que el amor sigue siendo una parte esencial de la vida, aunque el matrimonio como institución puede ser problemático. La idea de que el amor verdadero y duradero es una meta inalcanzable para muchos, a menudo entra en conflicto con las expectativas románticas tradicionales.

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Sexton sugiere que, en lugar de enfocarse únicamente en la perfección del matrimonio, los individuos podrían beneficiarse más al reconocer y aceptar la realidad de las relaciones humanas. El objetivo no debería ser simplemente mantenerse casado, sino encontrar maneras de construir una relación que sea satisfactoria y realista para ambos socios, ajustando las expectativas y comunicándose abiertamente sobre sus necesidades y deseos.