El Imparcial / Lo Curioso / langosta

Captan rara langosta de ‘Algodón de Azúcar’ en acuario, “una en un millón”

Esta maravilla marina es una de las más raras del mundo

Recientemente, una persona capturó una langosta con una coloración inusual frente a la costa de New Hampshire, Estados Unidos. Este especimen, conocida como “langosta de algodón de azúcar”, presenta tonalidades vibrantes de rosa, púrpura y azul, lo cual explica su apodo.

Se estima que este tipo de langosta ocurre con una frecuencia de aproximadamente 1 en 100 millones.

¿Qué hace especial a la langosta “algodón de azúcar”?

La langosta capturada muestra una tonalidad de colores poco común, resultado de una combinación de genética y dieta. Normalmente, las langostas son de color marrón moteado, lo cual les ayuda a camuflarse en el fondo del océano. Sin embargo, mutaciones genéticas pueden cambiar la química del pigmento que ingieren, resultando en colores distintos como naranja, azul y, en casos extremadamente raros, el aspecto “algodón de azúcar”.

¿Cómo se forma el color en las langostas?

El color de las langostas proviene de un pigmento rojo llamado astaxantina, que obtienen de plantas y crustáceos más pequeños. Este pigmento da a las langostas su color rojo característico después de cocinarse y su apariencia marrón moteada en estado natural. Las langostas tienen varias capas en su exterior: la piel, seguida por dos capas de cáscara. El pigmento se almacena en la capa de piel y luego se transfiere a las capas de la cáscara, donde interactúa con proteínas para crear diversos tonos.

La langosta “algodón de azúcar” es aún más rara que otras variaciones de color. Este tipo de langosta se cree que resulta de una alteración en el proceso normal de pigmentación, permitiendo que más astaxantina roja sea visible a través de la capa azul. Además, las langostas con colores brillantes son menos capaces de esconderse y son más propensas a ser depredadas, reduciendo sus probabilidades de sobrevivir y reproducirse.

La langosta fue donada por Joseph Krame al Seacoast Science Center en Rye, New Hampshire. Karen Provazza, del centro, comentó que la langosta está “saludable y se alimenta bien”. Ahora, el ejemplar puede ser visto en exhibición pública en el centro. La langosta, estimada en unos 8 a 10 años de edad, pasará el resto de su vida en el centro, lejos de los depredadores y de las típicas cocinas.

Te puede interesar: Zona ácida en profundidades del oceáno crece cada día, ¿cuáles son los riesgos?

Temas relacionados