Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Lo Curioso / Viral

Una pareja construye un acuario improvisado en un charco

Compraron 100 peces dorados por 16 dólares en una tienda de mascotas y los soltaron en el charco.

Una pareja construye un acuario improvisado en un charco

Lo que comenzó como una broma en una tarde calurosa de verano ha terminado por dividir a la comunidad de Bedford-Stuyvesant en Brooklyn.

Hajj-Malik Lovick, un residente de toda la vida del barrio, y su pareja decidieron convertir un charco constante, alimentado por una boca de incendios con goteras, en un pequeño acuario improvisado.

“Solo estábamos bromeando sobre agregar peces al charco”, recordó Lovick, de 47 años. “El agua siempre está ahí, así que, ¿por qué no hacer algo divertido con ella?”

Con esa idea, reforzaron los bordes del charco con piedras y ladrillos, compraron 100 peces dorados por 16 dólares en una tienda de mascotas y los soltaron en el charco. Lo que comenzó como una curiosidad local rápidamente se convirtió en un fenómeno viral, apodado por los vecinos como “El Acuario de Hancock Street Bed-Stuy”.

Sin embargo, la aparición de videos y noticias en línea sobre el proyecto ha generado preocupaciones entre las autoridades locales y activistas de los derechos de los animales.

El miércoles por la madrugada, dos vecinos, Emily Campbell y Max David, organizaron una misión de rescate para los peces, retirando 30 de ellos con redes y bolsas de plástico.

Campbell, una entusiasta de los peces de 29 años, expresó su preocupación por el bienestar de los peces, temiendo que murieran en condiciones inadecuadas.

“No quiero ver a estos peces asfixiarse en un charco”, comentó, reconociendo al mismo tiempo las tensiones raciales y sociales en el barrio, que ha visto un aumento de jóvenes residentes blancos en los últimos años.

Mientras Campbell trabaja en encontrar un nuevo hogar para los peces, Lovick y otros defensores del acuario insisten en que su experimento ha enriquecido la comunidad y proporcionado un hogar temporal para los peces.

“Estamos ayudando a estos peces dorados”, afirmó Lovick, mientras otros vecinos donaban decoraciones y alimentos para los peces.

La iniciativa ha generado conversaciones entre los vecinos, muchos de los cuales ven el proyecto como una forma de unir a la comunidad. Sin embargo, las autoridades han expresado preocupaciones de seguridad relacionadas con las fugas en la boca de incendios, y aunque han reparado la fuga varias veces, los residentes la han vuelto a abrir.

“Nos encanta la idea, pero sabemos que los peces merecen un mejor hogar que una acera”, comentó Beth DeFalco, portavoz del Departamento de Protección Ambiental de la ciudad.

Hasta la tarde del viernes, decenas de peces seguían nadando en el charco, mientras la comunidad debatía sobre el destino de este improvisado acuario urbano.

Sigue nuestro canal de WhatsApp

Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí

Temas relacionados