La historia del barco “más hermoso del mundo”

ESTADOS UNIDOS.- La fragata Amerigo Vespucci es un buque escuela de la Marina Italiana que lleva el nombre del explorador Amerigo Vespucci. Desde su puerto base en La Spezia, Italia, este majestuoso velero ha sido utilizado como barco de entrenamiento desde su botadura en 1931. Su diseño, inspirado en los grandes barcos de guerra de finales del siglo XVIII, refleja una rica tradición marítima que se mantiene viva a través de las generaciones de marineros que han aprendido el oficio a bordo de este emblemático navío.

Historia y construcción

La historia del Amerigo Vespucci comienza en 1925, cuando la Regia Marina, la antigua armada real italiana, ordenó la construcción de dos buques escuela. El primero, el Cristoforo Colombo, fue puesto en servicio en 1928, pero después de la Segunda Guerra Mundial, fue entregado a la Unión Soviética como parte de las reparaciones de guerra. El segundo buque fue el Amerigo Vespucci, construido en 1930 en el astillero naval de Castellammare di Stabia, cerca de Nápoles. El Amerigo Vespucci fue lanzado al mar el 22 de febrero de 1931 y comenzó a operar en julio del mismo año.

El Amerigo Vespucci es un velero de tres mástiles con un casco de acero, que mide 82.4 metros de largo y 15.5 metros de ancho. Con una capacidad de desplazamiento de 4146 toneladas, el barco puede alcanzar velocidades de hasta 12 nudos (22 km/h) bajo condiciones de viento favorables. Sus mástiles de acero, con alturas de hasta 54 metros, sostienen un total de 26 velas de lona tradicional que cubren una superficie de 2824 metros cuadrados.

Modernización y función en la actualidad

El Amerigo Vespucci ha pasado por varias actualizaciones a lo largo de los años, la más reciente entre 2013 y 2016. Durante este período, se le instalaron nuevos motores diésel y un motor eléctrico de última generación, así como modernos equipos de navegación electrónica. A pesar de estas mejoras, el barco mantiene muchas de sus características originales, como el uso de cuerdas de cáñamo tradicionales y la operación manual del timón, lo que resalta su compromiso con la preservación de técnicas de navegación clásicas.

Este barco no solo es un emblema de la ingeniería naval, sino también un símbolo de la herencia cultural italiana. A lo largo de su historia, el Amerigo Vespucci ha navegado por todo el mundo, participando en regatas de grandes veleros y en desfiles náuticos.

Su reputación es tal que en 1962, mientras navegaba por el mar Mediterráneo, el portaaviones estadounidense USS Independence envió una señal luminosa al Amerigo Vespucci preguntando: “¿Quién eres?” El barco de tres palos respondió: “Buque escuela Amerigo Vespucci, Armada Italiana.” El Independence contestó: “Eres el barco más hermoso del mundo.”

Un ícono en la historia naval

El Amerigo Vespucci ha desempeñado un papel crucial en la formación de oficiales navales, siendo un salón de clases flotante para cientos de cadetes. Durante el verano, el barco acoge a los aspirantes de la Academia Naval, aumentando su tripulación a aproximadamente 450 personas. A pesar de la modernización, el barco sigue operando de manera tradicional, utilizando un sistema de timón manual y velas de lona, lo que ofrece a los cadetes una experiencia auténtica de navegación.

También podría interesarte: La curiosa conexión entre Superman y la alerta sísmica en Ciudad de México

En 2024, el Amerigo Vespucci visitó Argentina, un evento que subraya su continua relevancia y lazos internacionales. Este viaje es solo uno de los muchos que el barco ha realizado, demostrando su durabilidad y la importancia de su misión como embajador flotante de la cultura italiana. A lo largo de su trayectoria, el Amerigo Vespucci ha circunnavegado el globo y sigue siendo un participante destacado en eventos internacionales, manteniendo su estatus como uno de los buques más reconocidos y respetados del mundo.