¿Tu salud está en riesgo?: Esto es lo que debes saber sobre los tinacos

HERMOSILLO, Sonora.- Los tinacos son esenciales para almacenar agua en los hogares, especialmente en áreas con escasez o para cumplir con ciertas instalaciones. En situaciones de racionamiento del agua, contar con un tinaco puede asegurar que siempre tengas acceso al líquido vital. Sin embargo, no todos los tinacos son igualmente seguros. Algunos modelos antiguos pueden representar un riesgo para la salud.

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Problemas de salud relacionados con los tinacos

El Instituto Nacional del Cáncer (NIH) advierte sobre los riesgos del asbesto, que incluyen problemas respiratorios crónicos como la asbestosis y un mayor riesgo de cáncer en varios órganos, incluyendo el estómago, la faringe, los ovarios y el colon. Las fibras de asbesto pueden contaminar el agua almacenada en estos tinacos porque no se disuelven. Cuando el agua contaminada es ingerida, las partículas pueden adherirse a las paredes del intestino y estómago, y pasar al torrente sanguíneo, lo que aumenta el riesgo de cáncer. Además, el contacto con la piel puede causar irritaciones y alergias.

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Cómo identificar tinacos de asbesto

Para asegurar tu seguridad, es importante saber si tu tinaco está hecho de asbesto. Puedes identificar estos tinacos por:

• Fecha de fabricación: Los tinacos de asbesto eran comunes entre las décadas de 1940 y 1980. Si tu tinaco fue fabricado en ese período, podría ser de asbesto.
• Forma y color: Generalmente, estos tinacos tienen formas ovaladas, rectangulares o horizontales, y suelen ser de color gris con una textura rugosa o irregular.

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Qué hacer si tienes un tinaco de asbesto

Si descubres que tu tinaco es de asbesto, es recomendable reemplazarlo por uno de polietileno, que es más seguro y fácil de mantener. Los tinacos de polietileno no presentan los mismos riesgos para la salud y son más sencillos de limpiar y mover.

Consejos para mantener el agua limpia en el tinaco

Para evitar la contaminación del agua en el tinaco, especialmente durante lluvias, sigue estos cinco consejos:

• Coloca una cubierta: Protege el tinaco con una cubierta para evitar que la lluvia y otros contaminantes entren.
• Verifica las conexiones: Asegúrate de que las conexiones y tapas estén bien selladas para prevenir la entrada de suciedad.
• Limpia con regularidad: Realiza limpiezas frecuentes para evitar la acumulación de sedimentos y bacterias.
• Usa filtros: Instala filtros adecuados en el punto de entrada del agua al tinaco para eliminar posibles contaminantes.
• Emplea productos de limpieza específicos: Utiliza productos diseñados para desinfectar el tinaco y mantener el agua libre de bacterias.

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