El caso del retrato de María Félix pintado por Diego Rivera, que perteneció a Juan Gabriel y que presuntamente se encuentra en manos de César Duarte

Diego Rivera, uno de los más grandes exponentes del arte latinoamericano, dejó un legado invaluable que incluye murales y retratos icónicos. Entre sus creaciones destaca un retrato de la famosa actriz mexicana María Félix, una pieza rodeada de controversias desde su concepción hasta su desaparición hace ocho años. Hoy en día, la ubicación de esta obra, valorada en millones de pesos, sigue siendo un misterio.

Pintado en 1949, el “Retrato de María Félix” uno de los cuadros más discutidos en la trayectoria de Rivera. Desde su revelación, la actriz, conocida como “La Doña”, expresó su descontento con la obra. En una entrevista con Jacobo Zabludovsky, confesó que no le agradaba el estilo de Diego Rivera, ni que la hubiera pintado semidesnuda, dejando expuesto parte de su pecho.

Yo quería que me pintara de Tehuana, pero dijo que era muy vulgar. Me pintó como él quiso”, declaró la actriz en su momento.

Tan insatisfecha estaba con el resultado que pidió a un albañil que cubriera ciertas partes del retrato con pintura blanca, lo que finalmente la dejó más conforme.

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A pesar de su rechazo, Rivera apreciaba su obra y pidió a Félix que le permitiera exhibirla, a lo que ella se negó, provocando una pelea que los distanció durante un año. Aunque su relación personal fue estrecha, marcada incluso por propuestas de matrimonio por parte de Rivera, la actriz nunca fue una admiradora de su estilo.

Tras vender el cuadro al doctor José Álvarez Amézquita, María Félix dejó de tener contacto con la obra, pero su destino no acabó ahí. Años después, el retrato llegó a las manos del famoso cantante Juan Gabriel, quien lo adquirió por la notable suma de 15 millones de pesos en la década de los 70. El Divo de Juárez, fiel admirador de “La Doña”, mantuvo la pieza en su colección personal, llegando a exhibirla en su residencia de Las Vegas.

Sin embargo, con la muerte del cantante en 2016, el paradero del retrato se volvió incierto. Se han barajado diversas teorías: algunos creen que el cuadro fue vendido en el mercado negro, mientras que otros especulan que se encuentra entre las pertenencias que Juan Gabriel dejó a su heredero universal, Iván Gabriel Aguilera. Sin embargo, debido a las disputas sobre la herencia del cantante, la situación sigue sin resolverse.

En 2020, el abogado Guillermo Pous declaró que el retrato estaba en posesión de César Duarte, exgobernador de Chihuahua, y que Iván Gabriel Aguilera planeaba interponer una denuncia para recuperarlo. Aunque hubo esperanza de dar con el cuadro, hasta el momento no se ha confirmado la ubicación exacta ni el estado actual de la obra.

El “Retrato de María Félix”, al igual que muchas de las obras de Diego Rivera, está catalogado como Monumento Artístico, lo que significa que su venta y traslado están regulados por el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL). Esto añade una capa de complejidad a su desaparición, ya que cualquier transacción debía haber sido notificada.

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Hoy en día, la obra sigue envuelta en misterio. La última vez que se tuvo información clara fue cuando Pous reveló que Duarte se había apropiado del cuadro, pero sin devolverlo a su legítimo propietario. Mientras tanto, la obra sigue fuera del alcance del público, negando a los admiradores del arte la oportunidad de contemplar un retrato que, aunque no fue del agrado de su protagonista, forma parte importante de la historia del arte mexicano.

La pregunta sigue en pie: ¿Dónde está el retrato de María Félix pintado por Diego Rivera? La respuesta, por ahora, sigue siendo una incógnita.