¿Lo amas o lo odias? Descubre los beneficios de comer hígado encebollado
Esto es lo que dicen algunos expertos sobre el consumo de este platillo.
Una de las comidas más cuestionadas, el hígado encebollado es un platillo muy popular en nuestro país. Como su nombre indica, se prepara con una mezcla de hígado y cebolla. Aunque no a todos les agrada, a continuación se enumeran algunos beneficios de consumir hígado encebollado para nuestro organismo.
Comenzando por los nutrientes, según la USDA National Nutrient Database, la principal fuente de datos sobre la nutrición de alimentos en Estados Unidos, el hígado es una excelente fuente de proteínas, hierro, y varias vitaminas, especialmente la vitamina A y las del complejo B como B12, B6, riboflavina. Estas son esenciales para el correcto funcionamiento y desarrollo del cuerpo.
Además la OMS, tambien informa que la vitamina A es crucial para la salud ocular y que esta vitamina puede ayudar a prevenir la ceguera nocturna.
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La deficiencia de nutrientes que proporciona el hierro puede causar problemas en el organismo tales como la anemia, cansancio, dificultad para respirar o dolores en el pecho.
Beneficios de la cebolla
Otro ingrediente de este platillo es la cebolla, que, al ser una verdura, ya aporta beneficios a nuestro organismo. Contiene nutrientes como potasio, fósforo, magnesio, calcio, hierro y sodio (en pequeñas cantidades). Entre las vitaminas que destaca se encuentran B1, B2, B6, niacina, ácido fólico y vitamina C.
Asimismo, de acuerdo con diferentes investigaciones llevadas a cabo, la cebolla posee también las siguientes propiedades: antiviral, antidiabética, antiprotozoaria, antioxidante, anticancerígena, antiasmática, antiinflamatoria, hepatoprotectora, neuroprotectora, hipotensora, hipoglucemiante y prebiótica.
— CIAD, Centro de Investiogación en alimentación y Desarollo.
Todo en exceso es malo
A pesar de ser una fuente rica en nutrientes, es fundamental consumir hígado con precaución debido a su alto contenido de vitamina A, que puede resultar nocivo en dosis elevadas. La ingesta excesiva puede desencadenar efectos adversos como náuseas, mareos y intensos dolores de cabeza.
Asimismo, su considerable cantidad de colesterol implica que un consumo excesivo podría incrementar el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, según los National Institutes of Health, la agencia de investigación médica más importante en los Estados Unidos.