Día de Muertos: ¿Cómo hacer y qué debe llevar un altar dedicado a las mascotas?
Se dice que las almas de los perritos nos visitan el 27 de octubre
Cientos de personas esperan con emoción el Día de Muertos para honrar la memoria de sus seres queridos, pero también para recordar aquellos momentos felices que compartieron con ellos.
Además de recordar a nuestros familiares y amigos que ya han partido, también se conmemoran a las mascotas que han fallecido. Se dice que las almas de los perritos nos visitan el 27 de octubre, fecha que se ha establecido como una forma de recordar a nuestros fieles compañeros que ya no están.
Si has perdido a una mascota, te contamos cómo y qué debe llevar un altar dedicado a ellos
¿Qué debe llevar un altar para tu mascota?
- Comida favorita:
el altar dedicado a tu mascota no puede faltar su golosina o plato de comida favorito.
- Juguetes:
Coloca uno de sus juguetes preferidos. Puede ser su pelota favorita o su peluche, ese que, aunque estaba viejo, jamás soltó. Cada juguete representa recuerdos maravillosos.
- Fotografía:
Una imagen de tu mascota es esencial en el altar. Captura sus travesuras y los momentos especiales que compartieron juntos.
- Collar o prenda:
Si tenía un collar distintivo o alguna prenda especial, inclúyelo en la ofrenda como símbolo de su presencia.
- Velas y flores:
Las veladoras y las flores de cempasúchil son esenciales, ya que guían a los espíritus de vuelta a casa. Los pétalos de esta flor ayudan a dirigirlos hacia su hogar.
- Agua:
Coloca un recipiente con agua para que puedan saciar su sed después del largo viaje.
¿Cuándo empiezan a llegar las almas de los difuntos?
- El 27 de octubre: llegan las ánimas de las mascotas.
- El 28 de octubre: Llegan las almas de las personas que tuvieron una muerte trágica.
- El 29 de octubre: Llegan las ánimas de quienes fallecieron ahogados.
- El 30 de octubre: Llegan las ánimas de quienes han sido olvidados o no tienen familias.
- El 31 de octubre: Llegan las ánimas de los seres que nunca nacieron o que están en el limbo.
- El 30 y 31 de octubre: Llegan los niños que no fueron bautizados.
- El 1 de noviembre: Llegan los difuntos que tuvieron una vida ejemplar, así como la de los niños que sí fueron bautizados.
- El 2 de noviembre: Llegan todas las almas.